La cinta dirigida por Mikhaël Hers se adentra a la vida de David, un joven de 24 años al que le cambiará la vida luego de que un ataque terrorista termine con la vida de su hermana.
Ciudad de México, 5 septiembre (SinEmbargo).- «Elvis has left the building» («Elvis ha abandonado el edificio»), una de las frases más icónicas dentro del mundo música es la encargada de dar pie a la historia de Amanda, filme que forma parte de la cartelera de la 23 edición del Tour de Cine Francés.
La cinta dirigida por Mikhaël Hers se adentra a la vida de David, un joven de 24 años que funge como intermediario entre el arrendador de un edificio en París y los inquilinos que llegan a habitar el inmueble.
David lleva una excelente relación con su hermana Sandrine y Amanda, su sobrina de siente años. Sus días pasan desapercibidos hasta que conoce a Lena, una joven profesora de piano con la que comienza a salir.
Sin embargo, la vida tranquila que solía llevar con sus seres queridos cambia en un cerrar de ojos cuando acude al picnic que Sandrine organizó para que ambos convivieran con sus nuevas parejas. Al llegar al parque donde era la cita, David se encuentra con la terrible escena de que un grupo de terroristas había atacado a todos los asistentes de aquel lugar. Este acto le arrebató la vida a su hermana.
El ataque no sólo le dejó a David un gran dolor sino también la responsabilidad de hacerse cargo de Amanda, su pequeña sobrina que también la está pasando bastante mal por la pérdida de su madre, Sandrine.
Al tratar de reacomodar su vida, ambos personajes pasan por una montaña de emociones. Por una parte esta Amanda, quien está harta de estar de «casa en casa» mientras su tío se las arregla para trabajar, y por otro lado está David, quien trata de asimilar cómo puede hacerse cargo de su sobrina a su corta edad.
A pesar de la dificultad que representa todo este «viaje», ambos personajes aprenderán a estar más unidos que nunca.
Amanda, protagonizada por Vincent Lacoste e Isaure Multrier, es un drama que pondrá a llorar a más de uno en la sala de cine. Su estremecedora historia pondrá a pensar a los asistentes sobre cómo hubieran actuado al estar en los zapatos de David.