El pez puede estar en movimiento cerca de 36 horas y es capaz de nadar a una velocidad de 1.5 cuerpos por minuto a contracorriente. Este avance puede facilitar que los futuros diseños de robots autónomos aumenten su eficiencia y su capacidad de conservar energía.
Londres, 19 de junio (EFE).– Investigadores estadounidenses han diseñado un pez robótico con un sistema vascular sintético que le permite mover partes de su estructura y almacenar energía, según un estudio publicado este miércoles en la revista Nature.
Ese sistema hidráulico interno ha permitido al robot nadar en el agua a contracorriente, en las pruebas llevadas a cabo por el equipo de la Universidad de Cornell (EU) que lo ha fabricado.
Este avance puede facilitar que los futuros diseños de robots autónomos aumenten su eficiencia y su capacidad de conservar energía, subrayan los autores del trabajo.
Para desarrollar su prototipo, Robert Shepherd y su grupo determinaron que los fluidos que se suelen utilizar como fuerza de transmisión en sistemas hidráulicos tienen asimismo el potencial de almacenar la energía.
Bajo esa premisa, los investigadores crearon un sistema vascular con baterías de flujo interconectadas e integradas en un robot en forma de pez Pterois -una especie presente en los océanos Índico y Pacífico-.
Gracias a un líquido electrolítico que circula a través de los conductos internos del robot, los sistemas electrónicos del autómata reciben la corriente necesaria para funcionar.
Al mismo tiempo, la circulación del líquido transmite movimiento a las aletas del pez, lo que le permite moverse en el agua.
El robot puede estar en movimiento cerca de 36 horas y es capaz de nadar a una velocidad de 1.5 cuerpos por minuto a contracorriente, según los investigadores.