De acuerdo con datos del Gobierno de México, el pasado año se desarrollaron 41 ciclones tropicales en las cuencas del Pacífico Nororiental y del Atlántico Norte. Este año, la temporada comienza el 15 de mayo en el Pacífico y en el Atlántico el 1 de junio, terminando para ambas zonas el 30 de noviembre.
Por Zoilo Carrillo
México, 13 may (EFE).- México recibirá más ciclones por el lado del Pacífico y menos por el Atlántico durante esta temporada, aseguró este lunes a Efe Christian Domínguez, investigadora del Centro de Ciencias de la Atmósfera de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
«La temporada ciclónica tropical para 2019 del lado del Atlántico va a ser por debajo de lo normal, significa que va a haber menos ciclones de los que normalmente hay, debido al fenómeno de El Niño» en el Pacífico, aseguró la especialista.
La temporada de ciclones tropicales comienza el 15 de mayo en el Pacífico y en el Atlántico el 1 de junio, terminando para ambas zonas el 30 de noviembre.
De acuerdo con datos del Gobierno de México, el pasado año se desarrollaron 41 ciclones tropicales en las cuencas del Pacífico Nororiental y del Atlántico Norte.
Durante la temporada pasada, seis ciclones tropicales impactaron de forma directa en el territorio mexicano y cuatro únicamente se desplazaron muy cerca de las costas nacionales, generando lluvias y vientos.
Este año, en el Pacífico, donde están estados como Sinaloa o Baja California, la afluencia de ciclones va a ser muy activa, esperándose «entre 13 y 14 ciclones», dijo Domínguez.
Por contra, en el Atlántico la experta espera que se registren menos de 12 ciclones.
En el Golfo de México, donde se sitúan estados como Veracruz, Campeche, Yucatán y Tamaulipas, se verá también una variación en el número de ciclones, pasando de los tres que normalmente impactan a solamente uno, y presumiblemente con categoría de tormenta tropical.
Sobre la intensidad, la doctora en Ciencias de la Tierra con especialidad en huracanes comentó que «del lado del Atlántico los huracanes van a ser muy débiles», esperándose categorías 1, 2 o 3 en la escala de Saffir-Simpson.
Esta escala mide la velocidad del viento por la superficie. A partir de 119 kilómetros por hora se considera huracán.
«Si es huracán categoría 1, va de 119 a 153 kilómetros por hora. La categoría 2 va de 154 a 177. La 3, de 178 a 209 kilómetros por hora», detalló.
Las dos últimas categorías van de 210 a 251 kilómetros por hora en el caso de la 4 y, cuando supera los 251, se considera categoría 5, «un tipo de huracán muy mortal, que arrasa casas, vehículos y seres humanos».
Del lado del Pacífico se espera una mayor intensidad, con huracanes que «pueden alcanzar categorías 4 o 5», por el fenómeno de El Niño.
El fenómeno de El Niño se refiere a cuando se dan temperaturas altas en el océano Pacífico, «que hacen que la circulación de la atmósfera cambie y haya vientos muy intensos del lado del Atlántico».
«Estos vientos impiden que se desarrollen los ciclones tropicales ahí, pero del lado del Pacífico como tienen las temperaturas altas, tienes las condiciones ideales para que se formen ciclones», precisó.
Con el cambio climático, se tienen proyecciones de que los huracanes alcancen una mayor potencia en los próximos 50 o 100 años.
México cuenta con el Sistema de Alerta Temprana de Ciclones Tropicales (SIAT-CT), el cual ha estado funcionando «no de manera óptima, pero ha sido lo que México ha utilizado», según consideró la especialista.
Este sistema permite pronosticar con tres días de antelación dónde va a impactar el ciclón tropical.
Como opinión personal, expuso que «la gestión del riesgo que ha hecho México no ha sido la más adecuada».
Esto se debe a la tardanza con la que evacúa a la población en caso de peligro, pues el personal de protección civil suele actuar 6 horas antes aún sabiendo el pronóstico con 3 días de antelación.