Fuentes del sector judicial informaron a SinEmbargo desde el pasado 19 de diciembre sobre el posible cierre del expediente por medio de una resolución de abstención de ejercicio de la acción penal de Alberto Elías Beltrán.
Hoy, el diario Reforma publicó que tuvo acceso al expediente de la investigación contra Ricardo Anaya y confirmó que no hay pruebas que acrediten el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita.
Ciudad de México, 5 de marzo (SinEmbargo).– La Procuraduría General de la República, hoy Fiscalía General, exoneró a Ricardo Anaya, el ex candidato presidencial del Partido Acción Nacional (PAN), del delito de lavado de dinero que se le imputó durante la campaña electoral, informó hoy Reforma.
La absolución definitiva quedó registrada en el expediente del político el pasado 28 de noviembre, dos días antes de que el ex Presidente Enrique Peña Nieto terminara su sexenio.
El expediente señala que no hay pruebas que acrediten el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita:
«No existen datos de prueba suficientes aún de manera circunstancial que permitan acreditar el hecho con apariencia de delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita», señala el expediente suscrito por el Subprocurador Especializado en Investigación de Delincuencia Organizada, Alonso Israel Lira Salas, al que tuvo acceso Reforma.
La resolución continúa: «Una vez concluida la investigación, no se acreditó la ilicitud del recurso, por el contrario, se estableció la existencia de los recursos y que devienen de un crédito».
Fuentes del sector judicial informaron a SinEmbargo desde el pasado 19 de diciembre sobre el posible cierre del expediente por medio de una resolución de abstención de ejercicio de la acción penal de Alberto Elías Beltrán.
“Hubo un fuerte descontento entre los mandos medios de la Procuraduría, entre los que integraron el expediente y realizaron la investigación en contra de Anaya. Se sintieron utilizados. De un día para otro les dijeron que hasta allí, y que se terminaba todo”, dijo una fuente. “Muchos dijeron que habían soportado ‘mentadas de madre’ durante meses porque creyeron que había voluntad de llegar al fondo del caso. Luego vino la desaceleración del caso, y después simplemente llegó la resolución de abstención”, agregó.
CASO ANAYA
El 12 de junio, la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) atrajo una investigación contra Ricardo Anaya Cortés por el delito de lavado de dinero.
Ese mismo día, los mismos anónimos que publicaron el video anterior que involucra a Anaya Cortés con supuesto lavado de dinero para él y para su campaña, liberaron una entrega más, justo minutos antes de que iniciara el último debate presidencial y cuando el panista y Meade Kuribreña se habían cerrado en las encuestas, en busca de un segundo lugar.
No era la primera vez que Anaya era ligado a presuntos casos de corrupción y enriquecimiento ilícito. Sin embargo, al menos en lo legal, ha librado todos los señalamientos que pesan sobre él.
Desde el año pasado, la noticia persigue al panista queretano: entre 2014 y 2016, compró y vendió un terreno en su estado natal. Lo adquirió por poco más de 10 millones de pesos y a los dos años de la compra, construyó siete mil metros cuadrados de una nave industrial que vendió en 54 millones de pesos.
El ex coordinador de la campaña de Anaya, Jorge Castañeda, atribuyó en varias ocasiones que el escándalo del supuesto lavado de dinero fue lo que frenó el ascenso del ex candidato panista en la contienda presidencial.
En reiteradas ocasiones, Anaya y su equipo dijeron que el tema ya quedó aclarado, que él no está implicado en el supuesto delito y que la PGR no lo citó a declarar.