En su primera semana como Legisladora electa, Ocasio-Cortez, dio algunas muestras de las luchas por el poder en el Congreso cuando se presentó con unos manifestantes frente a las oficinas de Nancy Pelosi, la dirigente demócrata que aspira a ser nuevamente la presidenta de la cámara baja. Pelosi, quien no se había asegurado por entonces el apoyo de Ocasio-Cortez, permitió la manifestación y en las redes circularon videos de la protesta. Poco después, Ocasio-Cortez dijo que votaría por Pelosi.

Por Laurie Kellman y Lisa Mascaro

Washington, EU, 21 de noviembre (AP).— Preparó una sopa y lavó la ropa en público. Narró buena parte de lo que describe como el abc del Congreso. Sabemos cuánto tiene en el banco -menos de 7 mil dólares- y lo que piensa de los comentarios sobre su ropa.

Tantos detalles íntimos han mantenido en el candelero a Alexandria Ocasio-Cortez desde su sonada victoria sobre un veterano cuadro demócrata en las primerias de Nueva York en junio. Para cuando asuma su banca en la Cámara de Representantes el 3 de enero como la mujer más joven en la historia de ese órgano, Ocasio-Cortez, de 29 años, tendrá un amplio reconocimiento y habrá revelado algunas intimidades del Capitolio.

Alexandria Ocasio-Cortez bromea con otras dos representantes electas, Debbie Mucarsel-Powel y Abby Finkenauer, durante una sesión de orientación en Washington. Foto: AP

“Muchachos, hay túneles secretos entre los edificios del gobierno”, susurra en broma en las redes sociales.

Los túneles no son ningún secreto y son frecuentados por turistas, periodistas y legisladores. Pero no es fácil ubicarse allí, y tampoco lo será manejarse en el Congreso. Consciente de ello, Ocasio-Cortez habla en las redes sociales no solo de las labores domésticas, sino de su vida como futura legisladora. Sus entradas en Instagram no duran mucho tiempo en la web, pero se propone mantenerlas en un esfuerzo por “humanizar nuestro gobierno”.

“Muchas veces vemos las noticias por cable o lo que pasa en la televisión y lo único que leemos es proyectos de ley, legislaciones o la dinámica de la política”, declaró el lunes por la noche en MSNBC. “Pero creo que es realmente importante que le mostremos a la gente que el gobierno es algo real, algo en lo que podemos participar”.

Ocasio-Cortez habla a sus partidarios el martes 6 de noviembre de 2018 en el distrito de Queens, NY. Foto: AP.

En su primera semana como Legisladora electa, Ocasio-Cortez, una demócrata socialista, dio algunas muestras de las luchas por el poder en el Congreso cuando se presentó con unos manifestantes frente a las oficinas de Nancy Pelosi, la dirigente demócrata que aspira a ser nuevamente la presidenta de la cámara baja. Pelosi, quien no se había asegurado por entonces el apoyo de Ocasio-Cortez, permitió la manifestación y en las redes circularon videos de la protesta. Poco después, Ocasio-Cortez dijo que votaría por Pelosi.

Ese y otros episodios similares dan una pauta de cómo Ocasio-Cortez y su manejo de las redes sociales encajan en una legislatura que se está rejuveneciendo y diversificando. El estilo de Ocasio-Cortez le permite comunicarse directamente con sus votantes y responder a las críticas casi en tiempo real.

“Sabe cómo manejarse en este terreno mejor que los demás”, afirmó Yvette Simpson, directora ejecutiva de Democracia para América, un comité de acción política que apoya causas progresistas. Además, señaló, “no le rinde cuentas a esa estructura del poder” del Congreso. “Le rinde cuentas a la gente que la puso allí”.

La política de Ocasio-Cortez conlleva algunos riesgos. Cada palabra que pronuncia o escribe será analizada en el Congreso y la campaña de reelección para el 2020 ya ha comenzado en la práctica.

Ocasio-Cortez, el martes, 6 de noviembre del 2018, en el momento en el que emitió su voto, en la comunidad de Parkchester, en el Bronx. Foto: AP

Ocasio-Cortez ya experimentó en carne propia el nivel de escrutinio que la espera. Cuando se le preguntó en PBS en julio sobre sus puntos de vista en torno al capitalismo, a la luz de la salud de la economía y el bajo desempleo, Ocasio-Cortez respondió: “Observamos esas cifras y pensamos que el desempleo es bajo porque todos tienen dos trabajos”.

La reacción no se hizo esperar. Al determinar la tasa de desempleo, no se toma en cuenta si una persona tiene uno o más trabajos. Además, el porcentaje de personas con varios trabajos ha bajado ligeramente desde mediados de los años 2000, según la Oficina de Estadísticas Laborales.

Su figuración la expone a las críticas.

“Si estoy caminando en el Congreso luciendo un saco, se ríen y me toman fotos desde atrás”, dijo en las redes sociales el 15 de noviembre, después de que un periodista publicase una de esas fotos y se preguntase si la ropa que usa es la de “una muchacha que lucha por salir adelante”.

Ocasio durante un reunión en el Capitolio. Foto: AP

“Si camino con la mejor ropa usada que tengo, se me ríen y me toman fotos de atrás”, expresó.

Los conservadores ponen en duda su afirmación de que no puede pagar los altos alquileres de Washington. Un portavoz de Ocasio-Cortez dijo el martes que tiene menos de 7 mil dólares en el banco, que le deben durar hasta que empiece a cobrar en el Congreso en enero. A partir de entonces, no obstante, ganará 174 mil dólares al año.

También se metió en aprietos al hablar de las “tres cámaras del gobierno”, en lugar de las tres “ramas”. La ex Gobernadora de Alaska y ex candidata a la vicepresidencia por los republicanos Sarah Palin, quien ha tenido numerosas metidas de pata, dijo en un tuit que Ocasio-Cortez no sabía cosas cívicas básicas.

Ocasio-Cortez indicó que no hará presentaciones públicas en las próximas semanas para enfocarse en la apertura de dos oficinas, una en Nueva York y otra en Washington.

“Pero no se preocupen”, tranquilizó a sus partidarios. “Seguiré en insta, twitter, etc.”, acotó, aludiendo a Instagram.