Disidentes del Sindicato del Heroico Cuerpo de Bomberos se quedan sin trabajo a partir de esta quincena por contravenir las disposiciones de Ismael Figueroa Flores, líder sindical y candidato a una diputación local de la coalición “Por México al Frente” en la Ciudad de México.
Los bomberos revelan que incluso algunos miembros del sindicato llegaron a robar comprobantes de domicilio en la Delegación Benito Juárez, cuando el dirigente les pidió cambiar su credencial de elector para asegurar votos en caso de ser postulado a una diputación federal por ese distrito.
Ciudad de México, 28 de abril (SinEmbargo).– Un grupo de 27 bomberos del Heroico Cuerpo de Bomberos se quedó sin trabajo y sin su quincena a partir del próximo 30 de abril por no aceptar las condiciones de los líderes sindicales del Sindicato del Heroico Cuerpo de Bomberos, quienes les piden a sus agremiados cuotas que alcanzan los 500 pesos quincenales y acudir a actos proselitistas a favor de los candidatos de la coalición “Por México al Frente” en la Ciudad de México, afirmaron en entrevista con SinEmbargo algunos de los afectados.
Los bomberos disidentes son objeto de persecución por parte de Ismael Figueroa Flores, dirigente sindical y hoy candidato a una diputación local por el Distrito 11 por el Partido de la Revolución Democrática (PRD), Partido Acción Nacional (PAN) y Movimiento Ciudadano (MC), desde enero de este año por tratar de constituir un nuevo sindicato. De hecho cuatro de ellos fueron golpeados y amenazados de muerte.
El 30 de enero pasado, día del ataque, Figueroa Flores llegó a la estación ubicada en la Delegación Benito Juárez acompañado de unos 100 hombres y mandó llamar a cuatro bomberos disidentes para cuestionarles la conformación de un nuevo sindicato, narraron.
“Le dijimos que estábamos cansados de la prepotencia con que maneja el sindicato, de las humillaciones que les hace a los compañeros, que por eso decidimos conformar una nueva asociación. Nos dijo: ‘hijos de su puta madre’, y provocó a los compañeros a agredirnos. Un compañero me amenazó y me dijo que iba a valer madre. Ismael Figueroa les dice: ‘ya rómpales la madre’. A mí me golpearon un ojo, me quedó un hematoma y me dirigí a la agencia del Ministerio Público de Benito Juárez a denunciar los hechos y hasta ahorita el Ministerio Público no ha hecho nada”, dijo Miguel Ángel Mejía Hernández, uno de los bomberos despedidos, y quien tenía 19 años de servicio.
El enojo de los disidentes se debió a que el líder sindical les pedía cuotas para pagar a los encargados de la limpieza en las estaciones, comprar herramienta, reparar unidades y hasta para irse a desayunar.
En la Ciudad de México hay 2 mil bomberos y ganan a la quincena 7 mil 500 pesos, de los cuales deben entregar al sindicato 500 pesos como suma de todas las cuotas que les piden, aseguraron los disidentes despedidos.
Ismael Figueroa también les solicitó recabar firmas para su postulación como Diputado Constituyente en 2016 y los obligó a cambiar su dirección a la Delegación Benito Juárez, e incluso a robar recibos en las viviendas a las que acudían a un servicio para utilizarlos como comprobante de domicilio para el trámite de cambio ante el Instituto Nacional Electoral (INE) con la finalidad de asegurar votos si lograba la candidatura de una diputación federal, afirmó Mejía Hernández.
“Nos obligó a reunir 50 firmas con credenciales de elector de personas del Distrito Federal. De ahí se le viene a la cabeza ser Diputado por Benito Juárez. Se acomoda en el PRD y obliga a todos los compañeros a cambiar nuestra dirección de residencia a la delegación Benito Juárez. Él nos mandó una serie de colonias a las que llamó ‘colonias amigas’ para que buscáramos esas direcciones. Cuando íbamos a los servicios a esas colonias les decíamos a la ciudadanía que nos prestaran su comprobante de domicilio para efecto de poder hacer el cambio. Algunas personas sí no los prestaron, pero supe de algunos compañeros que no y tuvieron que hurtar los comprobantes de domicilio”, dijo.
En febrero el INE inició una investigación por el cambio masivo de los bomberos a la delegación Benito Juárez.
El 1 de marzo Ismael Figueroa anunció que se separaba de la Secretaría General del sindicato para lanzarse como candidato de una diputación federal por el Frente. Sin embargo, los bomberos disidentes afirmaron que eso jamás sucedió y que Figueroa Flores sigue siendo el líder sindical.
El dirigente no obtuvo la postulación federal y a finales de marzo el Frente lo registró como candidato a una diputación local por el Distrito 11.
Bomberos como Miguel Ángel Mejía, Noel García Murillo y Jonathan González Romero, quienes fueron golpeados el 30 de enero en las instalaciones de la estación Benito Juárez, interpusieron una denuncia por robo con violencia, se abrieron carpetas de investigación, pero no hay avances.
Al contrario, con la salida de Raúl Esquivel, el “Jefe Vulcano”, de la Dirección del Cuerpo de Bomberos de la Ciudad de México, los afectados ya fueron dados de baja y sus salarios suspendidos a partir de la quincena en curso.
Esquivel dejó la dirección por una serie de conflictos con el ex líder sindical Ismael Figueroa y en su lugar fue nombrado Jorge Cortés Hernández, quien también participó el 30 de enero en la agresión a los bomberos disidentes de acuerdo con las denuncias ante el MP.
Antes de su salida el “Jefe Vulcano” recibía las actas de los bomberos disidentes desde enero en donde hacían constar que no les permitían el acceso a las estaciones de bomberos cuando se presentaban a trabajar, para obligarlos a generar faltas y así darlos de baja.
La recepción de esas actas era lo único que mantenía el sueldo de los disidentes, explicó Mejía Hernández.
“Lamentablemente harán lo que quieran porque están protegidos por este Gobierno de la Ciudad de México, así que nosotros nos quedaremos ya sin trabajo, no podemos hacer nada. A ver si pierden la elección y llega otro partido, a ver si nos regresan nuestro trabajo”, dijo Mejía Hernández.
SON UTILIZADOS PARA MITINES DEL PRD
Eliodoro González Romero, subinspector bombero y secretario general del nuevo Sindicato del Heroico Cuerpo de Bomberos Unión y Fuerza de la Ciudad de México –quien está a la espera de la toma de nota de la Junta Local de Conciliación y Arbitraje– afirmó que durante la gestión de Figueroa Flores han sido despedidos alrededor de 400 bomberos.
Además aseguró que los bomberos son utilizados como «acarreados» para hacer proselitismo político en favor de los candidatos del Frente Alejandra Barrales Magdaleno, candidata a la Jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, y Ricardo Anaya Cortés, candidato a la Presidencia de la República.
“Los obliga a hacer proselitismo en su beneficio para su campaña por el PRD […].Hay varios compañeros inconformes, él se lleva a los bomberos a la fuerza, aunque no quieran”, dijo.
González Romero subrayó que los bomberos son utilizados en la campaña de Barrales Magdaleno y recordó que el domingo 22 de abril, el día del primer debate entre los aspirantes a la Presidencia de la República, fueron llamados a manifestarse en contra de Andrés Manuel López Obrador, candidato de la coalición “Juntos haremos historia”.
“El día domingo obligó a muchos compañeros a ir hacer campaña en contra de López Obrador”, afirmó.
Jonathan González Romero, otro de los bomberos golpeados y amenazados, afirmó que sabe que a los bomberos les piden acudir a los mítines de Alejandra Barrales.
“Hay compañeros que aseguran que los están obligando a ir a la campaña de Alejandra Barrales”, dijo.
Carlos González Martínez, ex Consejero del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF), explicó en entrevista con SinEmbargo que coaccionar el voto de alguien es un delito electoral previsto en el código penal que debe ser perseguido por la Fiscalía Especializada para la Atención de Delitos Electorales (Fepade).
El ex Consejero recordó que en México se legisló la prohibición masiva corporativa gremial a un partido político. Los sindicalizados pueden afiliarse de manera individual e incluso pueden marchar y asistir a mítines proselitistas, siempre y cuando sea de manera libre.
“Lo que se prohibe no es que los sindicatos puedan marchar, apoyar a algún acto de campaña, sino que afilien a sus integrantes un partido sin que sea voluntad de ellos hacerlo. No hay restricción legal para que un sindicato apoye una candidatura, siempre y cuando la participación de quienes asisten sea libre y voluntaria”, explicó.
González Martínez aclaró que “no se vale que los sindicatos usen sus estructuras y poder sobre sus agremiados”. Un líder sindical que lleva a la fuerza a sus agremiados a un mitin incurre en un delito electoral.
“Ellos tendrían que denunciar, los afectados. Sí es un delito, no no porque sea una sindicato, sino porque está coaccionando el voto de alguien y eso es delito lo haga quien lo haga”, dijo.