En un país en el que el año pasado se decretaron emergencias epidemiológicas por sobrepeso, obesidad y diabetes, es «una grosería contra el sentido común» el colocar publicidad utilizando los símbolos navideños criticaron activistas que protestaron en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México por el árbol navideño colocado por la empresa Coca- Cola.
Acusaron que el árbol de Navidad del Zócalo es el más claro ejemplo de la estrecha relación que estas empresas establecen con los gobiernos para apropiarse de los espacios y símbolos más representativos.
El año pasado murieron 105 mil mexicanos a causa de la diabetes y 75 mil personas son amputadas cada año a causa de este padecimiento.
Ciudad de México, 13 de diciembre (SinEmbargo).- Por tercer año consecutivo, la organización El Poder del Consumidor (EPC) exigió el retiro del árbol navideño colocado por la empresa Coca- Cola en la plancha del Zócalo de la Ciudad de México, ya que, manifestaron activistas, el alto consumo de bebidas azucaradas provoca consecuencias en la salud, entre ellas, obesidad y diabetes.
En un país en el que el año pasado se decretaron emergencias epidemiológicas por sobrepeso, obesidad y diabetes, es «una grosería contra el sentido común» el colocar publicidad utilizando los símbolos navideños, criticó Alejandro Calvillo Unna, director de la organización en favor de la salud.
Asimismo, subrayó que la principal causa de que México viva las alertas epidemiológicas son justamente las bebidas azucaradas que se publicitan en el árbol navideño con una altura de aproximadamente 20 metros colocado en la plancha del histórico Zócalo capitalino.
«Nuestro llamado hoy es a que se retire la publicidad de un espacio como este», urgió Fiorella Espinosa, nutrióloga y especialista en salud pública, integrante de EPC, quien además mencionó que, por ejemplo, una botella de Fuze Tea contiene 15 cucharadas de azúcar, cuando las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) se mantienen en un consumo de menos de 10 por día.
Y agregó que «cada producto [del árbol Coca- Cola] tiene una cantidad de azúcar que aumenta el riesgo de obesidad y diabetes y supera las cantidades recomendadas por la OMS».
México, subrayó Calvillo, es uno de los países con índices más altos de diabetes en el mundo, recordó que el año pasado murieron 105 mil personas a causa de dicho padecimiento no transmisible y alertó que de no trabajar para mitigar la problemática, 1 de cada 2 niños que nacieron después de 2010 desarrollarán la enfermedad.
Asimismo, señaló que derivado de la diabetes, 75 mil personas son amputadas en el país cada año, y, aunque algunas podrían ser tratadas para evitarlo, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) «no quiere gastar» en recursos humanos y medicamentos para hacerlo.
Hoy por hoy, de acuerdo con Fiorella Espinosa, el 13 por ciento de los adolescentes mexicanos vive con diabetes.
Por si fuera poco, el activista denunció que al permitir la exhibición del árbol, el Gobierno de la Ciudad de México a cargo de Miguel Ángel Mancera Espinosa y la empresa Coca- Cola están en contubernio.
«No entra en ninguna lógica mas que en la de contubernio con las autoridades […] Es un cinismo, no les importa la salud de los niños y adultos mexicanos», denunció.
Y añadió: «Coca-Cola se ha apropiado y explotado los símbolos de la Navidad, influyendo con un marketing voraz en los hábitos de consumo de la población mexicana, especialmente en los niños. El árbol de Navidad del Zócalo capitalino es el más claro ejemplo de la estrecha relación que estas empresas establecen con los gobiernos para apropiarse de los espacios y símbolos más representativos».
En 2015 y 2016, tras las protestas de la organización civil, la publicidad de la empresa trasnacional fue retirada.
«Esperamos que que el doctor Miguel Mancera [Jefe de Gobierno de la Ciudad de México] retire esta publicidad», dijo Calvillo.
De acuerdo con el Instituto de Evaluación y Mediciones de Salud de la Universidad de Washington, en 1980, 7 por ciento de los mexicanos tenía sobrepeso, pero en 2016 se multiplicó a 20.3 por ciento. Expertos señalaron en un reportaje para el diario New York Times que este repunte se debe en parte a la invasión de comida chatarra y bebidas altamente calóricas sin valor nutritivo que México importó con la firma del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).
Además de reducir drásticamente los aranceles transfronterizos, el TLCAN permitió la entrada de miles de millones de dólares en inversión extranjera directa a México; alimentó el crecimiento de las tiendas de conveniencia y los restaurantes estadounidenses de comida rápida, y dejó que el maíz barato, la carne, el jarabe de maíz de alta fructosa y los alimentos procesados inundaran el país.
Las principales cadenas de víveres y la mayoría de los negocios que venden comida en México cuentan con el respaldo de Estados Unidos o son socios de empresas como Walmart, Subway y Pizza Hut. Oxxo, la cadena de tiendas de conveniencia, es propiedad de Femsa, el conglomerado de alimentos y bebidas asociado con Coca-Cola, que ha crecido a 16 mil tiendas en contraste con las 400 que existían en 1990.
De acuerdo con cifras del Departamento de Agricultura de Estados Unidos citadas por el New York Times, la inversión directa de Estados Unidos en las empresas mexicanas de alimentos y bebidas se disparó a los 10.2 mil millones de dólares en 2012 en contraste con los 2.3 mil millones de dólares antes del TLCAN.