Su presencia en territorio de la República Federal de Alemania (RFA) data del fin de la Segunda Guerra Mundial y en tiempos de la Guerra Fría se consideraron como una fuerza de contención frente a la Unión Soviética.
Berlín, 31 jul (EFE).- El Gobierno alemán abordará la anunciada reducción de las tropas de EU estacionadas en su territorio con las regiones del país afectadas por una decisión que Berlín «lamenta» y que ha sido adoptada por Washington de forma unilateral.
«Tras el receso estival estudiaré cómo se puede apoyar a las regiones afectadas por los lamentables planes de retirada de las tropas de EU», apunta la Ministra de Defensa, Annegret Kramp-Karrenbauer, en un comunicado emitido por su departamento.
El texto constata que «el bienestar de Alemania y de Europa» dependen de su seguridad, cuya salvaguarda es «de interés alemán y europeo», cuestión a la que dedicará la ministra sus esfuerzos en el presente semestre de presidencia de turno de la Unión Europea (UE).
El anuncio de retirada de unos 11 mil 900 soldados estadounidenses estacionados en territorio alemán preocupa a los tres «Länder» afectados -Baden Württemberg, Baviera y Renania Palatinado-, los tres en el sur del país.
Especialmente afectado es Stuttgart -capital de Baden-Württemberg-, donde está el comando central de las tropas de EU europeas, que ahora se trasladará a Bélgica.
En una primera reacción, luego de detallar los planes de retirada el Secretario de Defensa de EU, Mark Esper, el pasado miércoles, el Gobierno de Berlín consideró a través de un escueto comunicado que éstos aún «no están cerrados y pueden tener que ser readaptados».
El Gobierno de la Canciller Angela Merkel no había sido previamente consultado por Washington. Esper detalló los planes en una conferencia de prensa desde el Pentágono, unas horas después de que fuentes del Ejecutivo de Berlín asegurasen estar pendientes de conocer esa intervención.
Inicialmente se esperaba que la retirada de tropas afectara a nueve mil 500 soldados. La decisión se ha adoptado tras reiterados reproches del Presidente estadounidense, Donald Trump, a la coalición de Merkel, a la que acusa de no invertir lo debido en Defensa.
Según Esper, de los 11 mil 900 militares que se retirarán de Alemania, cinco mil 600 se reubicarán en otros países de la OTAN, principalmente Bélgica e Italia, así como Polonia, mientras que otros seis mil 400 regresarán a su país.
TRUMP Y LA «MOROSIDAD» DEFENSIVA ALEMANA
Trump avanzó ya a mediados de junio su intención de reducir el número de tropas estadounidenses en Alemania, descontento por el, a su juicio, insuficiente gasto en defensa de Berlín.
El Presidente de EU insistió de nuevo el miércoles, poco después del anuncio de Esper, en su idea de que Alemania es «morosa» porque destina menos de un dos por ciento de su Producto Interior Bruto (PIB) a defensa, la meta que se han fijado los países de la Alianza. Su antecesor en la Casa Blanca, Barak Obama, había reclamado ya reiteradamente una mayor aportación alemana.
Estados Unidos tiene desplegados actualmente unos 52 mil efectivos -entre militares y personal civil- en las bases alemanas: unos 34 mil 500 son soldados en activo y el resto son empleados civiles del Departamento de Defensa. Alemania es así el país de Europa con más tropas estadounidenses, seguido de Italia, el Reino Unido y España.
Su presencia en territorio de la República Federal de Alemania (RFA) data del fin de la Segunda Guerra Mundial y en tiempos de la Guerra Fría se consideraron como una fuerza de contención frente a la Unión Soviética.
La decisión de Trump incide en el mal momento de las relaciones entre Berlín y Washington, pese a que Merkel sigue defendiendo el eje transatlántico, uno de los puntales de la política exterior alemana desde hace décadas.
Polonia, el primer país europeo que visitó Trump como Presidente, celebró ya el miércoles el anuncio de Washington, ya que previsiblemente parte de esas tropas se trasladarán a territorio polaco.