Son cálculos aproximados con grandes márgenes de error, dijo. Pero añadió que los cambios de temperatura se corresponden con los niveles de dióxido de carbono.
Por Seth Borenstein
Washington, 27 de Septiembre (AP).- Nuestro planeta está registrando las temperaturas más altas que ha tenido en más de 120 mil años y va en camino de alcanzar las mayores en más de dos millones de años, según un estudio.
Como parte de su tesis doctoral en la Universidad de Stanford, Carolyn Snyder creó un registro continuo de 2 millones de años de temperaturas. Su reconstrucción, publicada el lunes en la revista Nature, no calcula la temperatura de cada año sino los promedios de períodos de cinco mil años hasta un par de millones de años atrás.
Snyder basó su reconstrucción en 61 índices reveladores de la temperatura de la superficie del mar alrededor del mundo, tales como la proporción entre el magnesio y el calcio, la presencia de especies y la acidez. Pero a medida que el estudio se aleja en el tiempo, sobre todo a más de medio millón de años atrás, hay menos indicios disponibles y por tanto los cálculos son más inciertos.
Son cálculos aproximados con grandes márgenes de error, dijo. Pero añadió que los cambios de temperatura se corresponden con los niveles de dióxido de carbono.
El promedio de temperaturas los últimos cinco mil años —los que incluyen 125 años de emisiones industriales de gases de invernadero— es en general más alto que el de hace 120 mil años, dijo Snyder. Dos períodos interglaciales, uno de hace 120 mil años y otro de hace dos millones de años, fueron los más cálidos, con 2 grados Celsius por encima del promedio actual de los últimos cinco mil años.
Teniendo en cuenta tanto factores y tendencias del pasado como los actuales niveles de dióxido de carbono, Snyder calculó el grado de calentamiento previsible para el futuro.
Dijo que si los factores climáticos son los mismos que en el pasado —lo cual es un condicional muy grande— la Tierra avanza hacia un aumento de unos 4 grados Celsius en los próximos miles de años.
«Esto se basa en lo que sucedía en el pasado», dijo Snyder, «cuando no había seres humanos perturbando la atmósfera».