Pensar en la muerte de Anthony Bourdain, de Amos Oz, de Philip Roth, de Sergio Pitol: algunas podrían haberse evitado, de otras es triste llegar a una edad en la que tienes que partir y decir adiós a este mundo. Aquí, los famosos que han muerto en 2018.
Ciudad de México, 30 de diciembre (SinEmbargo).- “Sueño todo el tiempo que no puedo salir de un hotel victoriano con muchos pasillos y habitaciones. Paso mucho tiempo en los hoteles, pero este es amenazante, no lo puedo dejar. Y hay otra parte de este sueño donde estoy tratando de ir a casa y no puedo recordar adónde queda. Me siento como Quasimodo, el jorobado de Notre Dame, me siento como un freak, muy aislado”, decía el chef y presentador Anthony Bourdain, unos pocos días antes de morir, ahorcado y solo, en un hotel de Francia, a una psicóloga en Buenos Aires, donde había ido a encontrarse con Francis Mallman y a comer chorizos en La Costanera.
Suicidio. El Centro de Enfermedades de Estados Unidos informó que desde hace dos décadas los suicidios aumentaron en un 30 por ciento, la vida como un instante que pareciera ser sobre la que tenemos control. El libre albedrío para terminar con ella, a pesar de ser uno de los hombres más envidiados del planeta, que tenía fama, fortuna, juventud (tenía apenas 61 años) y mucho por hacer todavía.
Suicidio. Como el que tres días antes cometió la diseñadora Kate Spade, a los 55 años, víctima de la ansiedad, de la depresión, de sus demonios personales.
La depresión no es estar triste. La depresión requiere tratamientos. La depresión es uno de los males de la cultura occidental en aumento y cada vez más difícil de combatir.
Tim Berling, mejor conocido como el Dj Avicii, de origen sueco, se quitó la vida el 20 de abril en Mascate, Omán.
No es lo mismo que morirse de viejo, contento de haber dado al mundo el mayor de los conocimientos y haber disfrutado la vida como ninguno, como le pasó al cocinero Paul Bocuse (91 años), al diseñador Hubert Givenchy (91), a Charles Aznavour (94), a Stan Lee (95) y a George Bush padre (94).
LA VIDA SIN LOS ESCRITORES
Este año también murió Philip Roth, a los 85 años, un Premio Nobel que jamás llegó a tener y ciertas miradas feministas sobre su obra que él, a todas luces muerto, no alcanzó a padecer o debatir.
Este es el año en que ya no está Sergio Pitol (85 años). Su muerte dejó un sabor amargo, no sólo porque su grado de amistad y de entrega a las letras nos creaba la ilusión de que siempre sería joven, sino porque sus familiares entablaron una barrera entre él y sus admiradores.
Fue el año sin Amos Oz (79) y la tristeza porque no pudo ver lo que sin duda alguna vez se hará realidad: la inserción de Palestina en esos territorios, ya sin guerra y sin rostros dolientes.
Nicanor Parra vivió hasta los 103 años. Su antipoesía se hizo otra vez popular y aquí en México se lo recordó cuando vino a retirar su Premio Juan Rulfo, en la Fil en Guadalajara.
Fernando del Paso se fue unos días antes de que participara en la Feria Internacional del Libro en Guadalajara. José Trigo (1966), Palinuro de México (1977) y Noticias del Imperio (1987), destacan entre sus obras. En el 2015 fue distinguido con el prestigioso Premio Miguel de Cervantes.
Stephen Hawking dijo basta a su terrible enfermedad y murió, a causa de la esclerosis lateral amiotrófica, a los 76 años, en Cambridge, Reino Unido.
EL CINE Y LAS FIGURAS QUE SE FUERON
¿Quién no recuerda Novecento? Esa película larga, con grandes planos secuencias, en donde todos los inmigrantes podíamos sentirnos parte de algo sustancial, la lucha de las clases sociales en tiempo donde un hombre podía vender a otro y donde no había que comer más que un trozo de polenta.
Esa película la hizo Bernardo Bertolucci, uno de los cineastas más admirados que partió a los 77 años en su casa del Trastevere romano. Autor de El último tango en París y de El último emperador, fue uno de los grandes maestros de la cinematografía.
A los 86 años dejó este mundo Milos Forman, el gran creador de Amadeus, esa película donde aprendimos a admirar a Salieri, quien envidiaba a Mozart, en uno de los grandes papeles del estadounidense F. Murray Abraham.
Los bigotes y la sonrisa de Burt Reynolds, quien se fue a los 82 años, un poco olvidado del cine, que en su tiempo supo valerse de su papel de macho y seguro de sí mismo, en papeles de películas como Smokey and the Bandit.
LA MÚSICA SIN LAS MUJERES
La gran Aretha Franklin se fue a los 76 años, víctima de un cáncer de páncreas, dejando un legado musical extraordinario, que la convirtió en la estrella femenina del soul.
En España se fue la soprano Monserrat Caballé, a los 85 años, en el hospital Sant Pau de Barcelona. Tenía una voz clara, tersa y poderosa. Acompañó a Carreras, a Pavarotti, a Plácido Domingo. Y, por supuesto, cantó “Barcelona”, con Freddie Mercury.
María Dolores Pradera falleció a los 83 años, fue una gran cantante de boleros, de Chabuca Granda, de Cuco Sánchez, de José Alfredo Jiménez. Su voz fina y elegante marcó una época y una manera de sufrir las penas de amor.
La cantante Dolores O’Riordan, la gran voz sonora de The Cranberries, falleció ahogada en una bañera en un hotel de Londres. Fue accidental, dicen las crónicas.
OTRAS MUERTES QUE HAY QUE LAMENTAR
Murió Kofi Annán, el gran pacifista que llevó a la ONU a mediar entre los grandes procesos bélicos o pre-bélicos del siglo XX. Ganó, entre otras cosas, el Premio Nobel de la Paz en 2001. Tenía 80 años.
El rapero Marc Miller murió a los 26 años, a causa de una sobredosis.
MUERTOS EN MÉXICO
Difícil olvidar a la actriz María Rubio. Conocida como Catalina Creel, murió por causas naturales a los 83 años. Rogelio Guerra, el veterano actor, falleció a causa de un infarto, a los 83 años.
Fela Fábregas, la gran impulsora del teatro, murió a los 87 años.
Difícil fue la muerte por asesinato en la Colonia Narvarte, del ex integrante de Uff, Fabio Melanito.
Los fanáticos del bolero lamentaron la partida de Lucho Gatica, quien se fue a los 90 años.