En una escala del uno al diez, los capitalinos calificaron la situación actual de la Ciudad de México con un promedio de 4.67; en contraste, al ser cuestionados acerca de su nivel de satisfacción en su calidad de vida, el promedio aumenta a 7.11.
Ciudad de México, 30 de junio (SinEmbargo).- La inseguridad es considerada por los habitantes de la Ciudad de México como el principal problema que enfrenta la capital, mientras que cuatro de cada 10 piensa que las autoridades capitalinas no están haciendo nada por solucionarlo, reveló una encuesta realizada por El Universal.
Según un estudio publicado por el diario, siete de cada 10 capitalinos consideran que la inseguridad es el principal problema en la ciudad, mientras que otros males cómo la corrupción, crisis económicas, mal gobierno y el desempleo no son considerados como algo grave.
A pesar del reclamo ciudadano a las autoridades de la Ciudad de México por mayor seguridad, cuatro de cada 10 encuestados, alrededor del 39.9 por ciento, consideran que el Gobierno de la capital no está haciendo nada para solucionar estos problemas.
En una escala del uno al diez, los capitalinos calificaron la situación actual de la Ciudad de México con un promedio de 4.67; en contraste, al ser cuestionados acerca de su nivel de satisfacción en su calidad de vida, el promedio aumenta a 7.11.
Respecto al desempleo, la encuesta realizada por El Universal reveló que más del 70 por ciento de los capitalinos consideran que es difícil o muy difícil conseguir los medios económicos necesarios para sobrevivir en la ciudad; además, un porcentaje similar estima que conseguir un empleo es muy difícil.
En cuanto al acceso que tienen los capitalinos a los servicios de salud, alrededor de la mitad de los encuestados, 48.4 por ciento, indicaron que les resulta difícil o muy difícil ingresar a clínicas u hospitales, mientras que cuatro de cada diez encuestados opinan lo contrario.
El 72 por ciento de los entrevistados considera que la desigualdad en la Ciudad de México es alta o muy alta, mientras que aquellos con una opinión contraria apenas conforman el 16.8 por ciento.
