En el filme, Jane atiende metódicamente los rigores de su trabajo: responde llamadas telefónicas, imprime retratos de actrices, le miente a la esposa del jefe sobre el paradero de éste, desempaca un envío de medicamentos para la disfunción sexual, limpia manchas del sofá del jefe.
Park City, EU, 30 de enero (AP).- The Assistant es una de las primeras cintas de ficción que surge del movimiento #MeToo y el escándalo de Harvey Weinstein. Escrita y dirigida por Kitty Green, incluye a un ejecutivo depredador basado en Weinstein, pero éste no aparece en toda la película. El filme se enfoca más bien en el ambiente laboral tóxico a su alrededor, detallando un día en la vida de una empleada de baja jerarquía.
Green, una cineasta australiana, ha hecho documentales con los que ha intentado eliminar el lustre superficial del periodismo sensacionalista. Su ópera prima, Ukraine Is Not a Brothel, presentaba a un grupo feminista ucraniano famoso por hacer protestas topless. Su documental de 2017 Casting JonBenet usó a actores locales de Colorado para ahondar en el prominente caso irresuelto del asesinato de una reina infantil de belleza.
En 2017, Green estaba trabajando en una película sobre abuso sexual en las universidades cuando explotó el caso de Weinstein.
“Siempre me ha interesado el modo como la prensa cubre estos acontecimientos, en especial aquellos que involucran mujeres”, dijo la realizadora en una entrevista. “Me preocupaba un poco que los medios parecían enfocarse en estos hombres malvados y no en el sistema que los rodea y las estructuras que los mantiene en el poder. Quería verlo desde un ángulo diferente. En lugar de verlo de arriba abajo, quería verlo de abajo arriba”.
The Assistant, que se proyectó recientemente en el Festival de Cine de Sundance, tendrá un estreno limitado el viernes justo mientras transcurre el juicio de Weinstein. (El ex magnate del cine se ha declarado inocente de dos cargos de violación, un cargo de abuso sexual y dos de conducta sexual depredadora).
Las asistentes en Hollywood, como una nombrada Jane interpretada por Julia Garner en la película, también están encantadas. Desde el pasado octubre, #PayUpHollywood ha buscado presionar a la industria para que les dé a sus asistentes un trato más justo y mejores salarios.
The Assistant puede parecer similar a muchos titulares de noticias actuales, pero utiliza un enfoque deliberadamente contenido al presentar las dinámicas de género en el sitio de trabajo. Mientras Bombshell, el drama sobre Fox News, está lleno de estrellas y es ostentoso en su representación de acoso sexual en la compañía mediática, The Assistant es moderado y sobrio.
“Una de las cosas que ella mencionó la primera vez que nos reunimos es que quería que la película fuera muy silenciosa. Y yo creo que eso era importante porque el tema es muy ruidoso”, dijo Garner, la actriz de 25 años de Ozark. “De hecho es más poderoso cuando tienes una película realmente silenciosa, casi muda la mayor parte del tiempo, porque el tema es silencioso”.
En el filme, Jane atiende metódicamente los rigores de su trabajo: responde llamadas telefónicas, imprime retratos de actrices, le miente a la esposa del jefe sobre el paradero de éste, desempaca un envío de medicamentos para la disfunción sexual, limpia manchas del sofá del jefe.
Está narrado desde la perspectiva de Jane, capturando su interacción con los asistentes masculinos de mayor jerarquía que trabajan a su lado. Ellos asumen que ella entretendrá a los hijos del jefe cuando éstos vengan de visita. Le transfieren las llamadas de la esposa. Le encargan sus almuerzos.
Green presenta cómo el poder opera en la oficina y la naturaleza desconcertante de un ambiente tóxico que se ha vuelto rígido con el paso de los años.
“Mucha gente, mujeres y hombres, fueron víctimas y no estaban siquiera conscientes de eso. Era como todo un sistema en cierta manera”, dijo Garner. “Es como si fuera una experiencia extracorporal. Son arrojados a una situación horrible”.
Green dijo que entrevistó a unas 100 personas que habían trabajado como asistentes en su preparación para el filme. Encontró patrones en sus historias, como la obstaculización de ascensos según cómo eran estimadas en sus trabajos. La mayoría dejó la industria del cine.
“Yo no tengo ninguna experiencia como asistente, no en una compañía aquí, pero en Australia sí. Y sí noté que me despojaron de mi confianza. Cuando no te toman con seriedad, eso realmente sacude el sentido de tu ser”, dijo la cineasta. “Yo tenía que ir a buscar el café porque era mujer. Es absurdo y realmente te hace cuestionar tus ambiciones y te hace cuestionar si puedes llegar a esos cargos de poder. Hace que parezca inalcanzable”.
Green cree que, así como es valioso que las mujeres consigan cargos prominentes en la industria, es igual de vital que ocupen puestos de mejor jerarquía. “Necesitamos más mujeres con un pie en la puerta para empezar”, dijo.
La sublevación de las asistentes en Hollywood, señaló, es un paso en la dirección correcta.
“Es realmente maravilloso que la gente finalmente esté empezando a reanalizar estas estructuras de poder y el modo en que funcionan”, dijo Green. “Es fabuloso ver lo que están haciendo”.