Resuelto los problemas con los jurados, la Fiscal Andrea Goldbarg, estadounidense de origen argentino, comenzó la presentación de sus argumentos finales, tras un juicio de tres meses y la presentación de gran cantidad de evidencias de video, fotos, cartas, testimonios, con la que buscan una condena de culpabilidad para el mexicano.
Goldbarg se paró frente al jurado, formado por siete mujeres y cinco hombres, y comenzó recordando varios asesinatos que, según el último testigo cooperante del Gobierno, vio cometer a Guzmán Loera: «En noviembre (cuando comenzó el juicio) les dijimos que este juicio se trataba de dinero, drogas y violencia y lo hemos demostrado con evidencias». Y dijo que la violencia y la corrupción permitieron al acusado reforzar su negocio y sus ganancias.
Nueva York, 30 ene (EFE).- La Fiscalía comenzó este miércoles con cuarenta minutos de retraso la presentación de sus argumentos finales en el juicio en Estados Unidos por narcotráfico contra Joaquín «El Chapo» Guzmán, tras presentarse problemas con algunos de los miembros del jurado.
La Fiscalía dejó claro al jurado que lo importante del caso del Chapo no es demostrar si este era el máximo líder del cártel de Sinaloa, sino catalogarlo como un jefe, «organizador, supervisor u otra posición de esa organización» para poder condenarlo por narcotráfico.
«El acusado era un jefe de cinco o más personas, no hay que probar que era el máximo responsable» para condenarlo por narcotráfico, subrayó ante el jurado la fiscal Andrea Goldbarg, estadounidense de origen argentino, antes de insistir en que «era uno de los máximos líderes más allá de la duda razonable».
La defensa del acusado, que mañana realizará su exposición final, ha defendido a lo largo del juicio que el verdadero líder del cártel de Sinaloa era Ismael «el Mayo» Zambada, que permanece prófugo de la justicia.
Antes de comenzar, y con el jurado ausente, el juez de la corte federal de Brooklyn (Nueva York) Brian Cogan dijo en la sala que una jurado informó que para ella era «importante» saber si «El Chapo» pagaba a sus abogados o no.
El juez se reunió en privado con la mujer y le preguntó si podía decidir el caso en base solo en las evidencias que se habían presentado en el proceso, a lo que ella contestó de forma afirmativa, según se dio a conocer luego en la sala donde se celebra el proceso.
También indicó que un jurado había tenido problemas con su empleador y que debía regresar el lunes a su trabajo, pero, tras reunirse también con él, la situación se resolvió favorablemente.
Tras concluir el juicio esta semana, el jurado podría comenzar a deliberar este mismo viernes.
Resuelto los problemas con los jurados, la Fiscal Andrea Goldbarg, estadounidense de origen argentino, comenzó la presentación de sus argumentos finales, tras un juicio de tres meses y la presentación de gran cantidad de evidencias de video, fotos, cartas, testimonios, con la que buscan una condena de culpabilidad para el mexicano.
Goldbarg se paró frente al jurado, formado por siete mujeres y cinco hombres, y comenzó recordando varios asesinatos que, según el último testigo cooperante del Gobierno, vio cometer a Guzmán Loera.
«Dirigió su rifle a uno de los hombres y lo mató e hizo lo mismo con el segundo. Los torturó y asesinó porque eran miembros de un cártel rival», afirmó la fiscal al referirse a los asesinatos de dos miembros del cartel de los Zetas.
«En noviembre (cuando comenzó el juicio) les dijimos que este juicio se trataba de dinero, drogas y violencia y lo hemos demostrado con evidencias», señaló al agregar que la violencia y la corrupción permitieron al acusado reforzar su negocio y sus ganancias.
Indicó además a los miembros del jurado que el Gobierno ha probado «que es culpable más allá de la duda razonable», tras lo cual pasó a explicar cada uno de los diez cargos por los que finalmente será evaluado por el jurado.
La Fiscalía estará todo el día de hoy con sus argumentos y mañana le tocará el turno a la defensa, tras lo cual comenzará la deliberación del jurado.
El Gobierno de EU logró la extradición del Chapo, que era reclamado por varios estados en este país, en enero del 2017 para ser juzgado en Nueva York por narcotráfico, con el principal cargo de mantener una empresa criminal continua.
Desde entonces permanece aislado en una de las cárceles más seguras de EU, en el distrito de Manhattan, donde solo recibe la visita de sus abogados y en alguna ocasión de las gemelas de siete años que tuvo con Emma Coronel.
Durante los tres meses del juicio, el jurado escuchó las historias del cártel de Sinaloa contadas por sus protagonistas, exempleados muy cercanos al acusado, sus «compadres» como algunos le han llamado, o de sus exsocios, todos en espera de una reducción de sentencia a cambio de su testimonio.
A todos les escuchó con atención Guzmán Loera, quien según la Fiscalía construyó un imperio del tráfico de cocaína que tuvo como destino final calles en EU, en particular California, Nueva York y Chicago, un lucrativo negocio le habría generado 14.000 millones de dólares, según el Gobierno de EU, que en gran medida no ha podido localizar ni confiscar. EFE