El Sistema Nacional Anticorrupción se convirtió en una moneda de cambio. Tres partidos disputan imponer sus propuestas de Ley dejando de un lado el combate a la corrupción. ¿Quiénes bloquearon el debate?
Ciudad de México, 31 de enero (SinEmbargo).– El Sistema Nacional Anticorrupción está estancado en el Congreso. Partidos de oposición denunciaron bloqueos y boicots por parte del Partido Revolucionario Institucional (PRI) y su aliado, el Partido Verde Ecologista de México (PVEM), para dejar sin dientes las leyes reglamentarias que deben discutirse en un plazo que vence el 27 de mayo.
“Las comisiones que les toca, no han dictaminado, ni convocado siquiera para que el tema se discuta. Pareciera que en su agenda no es un tema prioritario cuando los ciudadanos lo que quieren es que México deje de estar entre los países de la OCDE [Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos] más corruptos”, denunció la Senadora del Partido Acción Nacional (PAN), Mariana Gómez del Campo Gurza.
Un estudio de Transparencia Internacional refirió esta semana que México es el país más corrupto de los 34 países de la OCDE, sin embargo, en la lista general de 168 naciones recogidas, México ocupó el sitio 95. Expertos financieros participantes en el trabajo calificaron a México con 35 de 100 puntos, mismo puntaje que en 2014.
A pesar de que dichos datos reflejan estancamiento, legisladores de grupos parlamentarios de oposición reiteraron que el partido oficial, junto con el Partido Verde Ecologista de México (PVEM) perdieron de pronto el interés en el tema, a pesar de que ha sido parte de su discurso, e incluso, fue una promesa del Pacto por México, en su compromiso número 85.
En el Senado, Pablo Escudero Morales, del PVEM, yerno del presidente del PRI, Manlio Fabio Beltrones Rivera, preside la Comisión Anticorrupción y de Participación Ciudadana. Está casado con Sylvana Beltrones Sánchez, ex Diputada Federal por el tricolor.
Mientras que en Diputados, la priista Areli Madrid Tovilla, de Chiapas, preside la Comisión de Transparencia y Anticorrupción.
“Está claro que el Gobierno no quiere que se discutan esos temas. Básicamente , el PRI y el PAN determinan la agenda la mayor parte del tiempo, entonces, si el PAN acusa al PRI de detenerlo, seguramente, tienen razón, aunque también responsabilidad”, consideró el Senador independiente, inscrito al Partido de la Revolución Democrática, Mario Delgado Carrillo.
Una de las comisiones referentes al SNA es la de Justicia, su presidente el Senador panista Fernando Yunes Márquez, refirió que el tema ha sido estudiado desde hace más de un año.
No hemos visto avances, ni ánimo de avanzar. Quieren convocar más foros, discusión, y debate, cuando la realidad es que eso ya se ha dado, y sí hay una verdadera voluntad del PRI y del Verde deberán pasarlo a dictaminarían para someterlo en la Cámara”,
Hasta ahora lo único que existe es la Reforma constitucional a 14 artículos que expidió los criterios generales del SNA. Destaca la creación de un comité coordinador de las instituciones relacionadas, una Fiscalía Anticorrupción y nuevas facultades al Tribunal Federal de Justicia Fiscal y Administrativa.
Sin embargo, varias de las atribuciones que tendrán dichos entes aún faltan por discutirse. Un tema que no es menor para el país. El Banco de México (Banxico) proyectó que en el 2015 la corrupción le costó al país el equivalente al 9 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB). O lo que es igual a un billón 602 mil 986 millones 130 mil pesos, o a 45 veces el presupuesto de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) .
UNA PARÁLISIS «TRANSPARENTE»
La parálisis del Senado también llegó a la Cámara de Diputados, en ésta última las reuniones de la Comisión de Transparencia y Anticorrupción han sido boicoteadas por diversos medios, refirió su presidente, el Diputado por el partido Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Rogelio Castro Vázquez.
La reunión programada para el jueves 28 de enero se tuvo que suspender por falta de quórum. Después de una hora de espera y media de la hora citada, los dirigentes de la comisión resolvieron que no tenía caso esperar más. El también Diputado por Yucatán, refirió que no han podido trabajar por este motivo en las dos últimas reuniones programadas.
“La anterior fue un caso. Hoy vinieron algunos diputados del PAN, algunos no vinieron por las reuniones plenarias, pero no se justifica, esta reunión se convocó desde la semana pasada”, dijo Castro.
Ante la evidente falta de miembros de la bancada del PRI y del Verde, el Diputado de ese partido, Hugo Daniel Gaeta Esparza, tomó la palabra, un momento después de declarada suspendida la sesión, para dejar en claro que sí hubo presencia de dos legisladores del partido oficial y uno del Tucán.
Castro dijo a SinEmbargo que piensa tomar cartas en el asunto, de continuar esta situación. “Como comisión tenemos la facultad de enviar un acta a mesa directiva, ya ahí nosotros no tenemos facultad, la mesa tiene que informar a los grupos parlamentarios. Esta es la segunda ausencia para algunas, para la tercera ya se puede pedir un cambio de integrante”, dijo.
MONEDA DE CAMBIO
El SNA se ha vuelto una moneda de cambio. O al menos esa podría ser una lectura que explique la dinámica de negociación en el Congreso. El jueves, en una conferencia del PAN, el Senador y Presidente del Senado, Roberto Gil Zuarth refirió que no aprobarán el Mando Único de Policía, sin que antes se tenga el SNA.
“El grupo parlamentario ha llegado a la conclusión, compartida con la dirigencia nacional, la iniciativa [del Mando Único] del Presidente Enrique Peña Nieto tal como fue presentada no tiene ninguna viabilidad con Acción Nacional”.
La iniciativa, que pretende subordinar a los policías municipales al mando de los ordenes estatales del país fue enviada al Congreso en diciembre del 2014.
Sin embargo, fue el asesinato de la Alcaldesa de Temixco, Gisela Mota Ocampo, a principios de este año, lo que reavivó el impulso del PRI por el cambio de modelo policial.
Entre las razones expuestas por Gil Zuarth para no aprobar el Mando Único está la profesionalización de policías honestos y confiables en todo el país como sea necesario.
“Precisamente por eso, es absolutamente inimaginable una reforma al sistema nacional de seguridad pública, sino avanzamos en el sistema anticorrupción. Es condición necesaria, que haya instituciones eficaces para castigar la corrupción. En consecuencia el paso necesario para discutir lo que hoy se conoce como mando único es precisamente que haya un avance notable en la aprobación del SNA”.