Manchester City había anunciado previamente que el delantero Gabriel Jesús y el lateral Kyle Walker dieron positivo la semana pasada. Más casos en los Citizens llevaron al aplazamiento del partido del lunes en la cancha del Everton.
Por Rob Harris
Inglaterra, 29 de diciembre (AP).- Los distintos brotes de coronavirus en los clubes ingleses han generado preocupaciones acerca de si es prudente continuar con los partidos.
El creciente número de casos positivos en la última semana es reflejo de un aumento en las infecciones en general dentro del país, que lidia también con una nueva variante más contagiosa del virus.
En una declaración, la Premier informó que hay 18 positivos luego de 1.479 pruebas a jugadores y personal de los clubes entre e 21 y el 27 de diciembre.
Y ello generó pedidos de suspender la competición, como ocurrió ya la temporda pasada.
“Cuando escucho en las noticias que la nueva variante se transmite más rápido que el virus original, pienso que sólo podemos hacer lo correcto, que es apagar esto”, dijo Sam Allardyce, técnico del West Bromwich Albion, luego que su equipo cayó por 5-0 ante Leeds. “Tengo 66 años, y lo último que quiero es contraer COVID. Estoy muy preocupado por mí mismo y por el fútbol en general. Si eso es lo que necesita hacerse, hay que hacerlo”.
“Tuvimos un caso positivo esta semana, y esto parece avanzar, sin importar los intentos que hagamos”.
Sheffield United siguió a Arsenal y Manchester City con su anuncio de que tenía casos del virus, pero su partido contra Burnley se disputó el martes. Burnley se impuso por 1-0.
Manchester City había anunciado previamente que el delantero Gabriel Jesús y el lateral Kyle Walker dieron positivo la semana pasada. Más casos en los Citizens llevaron al aplazamiento del partido del lunes en la cancha del Everton.
El técnico de Southampton Ralph Hasenhüttl se perdió el partido del martes contra West Ham, un empate sin goles, luego que una persona en su casa dio positivo del coronavirus. Southampton informó que Hasenhüttl se aislará “mientras evaluamos la situación”.
La liga estaba realizando dos pruebas semanales a jugadores y personal la temporada pasada, pero lo redujo a una por semana esta campaña.
Hace dos semanas, el Gobierno expresó preocupación sobre una nueva variante más contagiosa del virus que fue detectada inicialmente en el sur de Inglaterra. Entonces, los clubes en el área de Londres comenzaron a realizar dos pruebas semanales de nuevo.
El previo número más alto de casos en una semana de pruebas en la liga fue 16 el mes pasado.
El alza refleja el aumento de infecciones en Gran Bretaña, donde el total de muertes desde el estallido de la pandemia en marzo superó las 70 mil.
Más de 40 mil casos fueron reportados por primera vez en un solo día el lunes y el número de pacientes hospitalizados con COVID-19 ha superado el primero pico del brote en abril.
El regreso de los hinchas a los estadios fue reducido, y ahora solamente Liverpool y Everton pueden tener dos mil por partido.
La diseminación de las infecciones tiene un impacto especialmente severo en las divisiones profesionales bajas, con siete de 12 partidos de la tercera división aplazados el martes. Los médicos de los clubes Ipswich en el este y Rochdale en el noroeste han llamado a suspender la competencia.