Chapecó (Brasil), 29 oct (dpa) – El discreto desempeño de u ante el modesto Chapecoense de Brasil en la Copa Sudamericana de futbol dejó en alerta al actual campeón del certamen.
«Sufrimos más de lo que deberíamos. No podemos sufrir goles (en jugadas) de pelota quieta por ejemplo. Tendremos que progresar mucho si queremos pelear por el título», dijo el zaguero Jonatan Maidana.
El partido de vuelta de los cuartos de final fue disputado en la noche del miércoles en la ciudad de Chapecó, en el sur de Brasil.
Un entusiasta estadio Arena Índio Condá vibró con el espíritu guerrero de los locales, que complicaron la vida del poderoso equipo argentino, le ganaron por 2-1 y estuvieron en más de una ocasión a punto de eliminar al campeón.
Bruno Rangel anotó a los 21′ y 54′ minutos, al tiempo que el uruguayo Carlos Sánchez descontó para los argentinos en el 46′. La victoria local, en tanto, no fue suficiente para lograr la hazaña de llegar a las semifinales en su primer certamen internacional, puesto que en el partido de ida, en Buenos Aires, River se despachó con un contundente 3-1.
«Debemos sacar lecciones importantes de este partido ya que fuimos dominados en algunos momentos. Vamos a tener que crecer», admitió el guardameta Marcelo Barovero.
Por su parte, los brasileños, que dejaron la cancha aplaudidos de pie por la hinchada, exhiben el orgullo propio de quien «cayó de pie».
«El hincha entendió que luchamos del primero al último minuto, que nos entregamos aún cuando el desgaste físico era grande. Chapecoense luchó y cayó de pie», sintetizó el delantero Rangel.
El guardameta Danilo opinó que el equipo brasileñó llegó a tener en sus manos el boleto a semis.
«Creo que hicimos dos grandes partidos y por eso mismo la hinchada nos aplaudió, porque se dio cuenta que podríamos haber vencido. (…) Hicimos todo para merecer (la victoria) y por eso fuimos valorados», afirmó.