La medida también afecta a otras compañías afiliadas de Westinghouse Electric en Reino Unido y en EU, según Toshiba, que señaló que éstas «continuarán con sus actividades ordinarias» mientras se lleve a cabo la reestructuración de su deuda.
Tokio, 29 marzo (EFE).- La empresa estadounidense de energía nuclear Westinghouse Electric se declaró hoy en quiebra para acogerse a la protección de la normativa de este país, anunció hoy su matriz, la nipona Toshiba Corporation.
Westinghouse Electric, compañía afincada en Pensilvania, presentó hoy en Nueva York una «solicitud voluntaria de amparo» del Capítulo 11 de la Ley estadounidense de Quiebras, informó el conglomerado japonés con sede en Tokio, que posee el 87 por ciento de sus participaciones, en un comunicado.
En la práctica, esta medida permitirá a Westinghouse Electric iniciar el procedimiento para reorganizar su deuda, lo que a su vez limitará la parte de este saldo negativo que la matriz nipona se verá obligada a incluir en sus cuentas.
La medida también afecta a otras compañías afiliadas de Westinghouse Electric en Reino Unido y en EU, según Toshiba, que señaló que éstas «continuarán con sus actividades ordinarias» mientras se lleve a cabo la reestructuración de su deuda.
Westinghouse, que es junto a Toshiba el mayor constructor mundial de reactores nucleares, ha obtenido unos 800 millones de dólares en créditos y ayudas financieras para contribuir a esta reorganización, según se explica en el comunicado.
Las cuantiosas pérdidas que acarrea Westinghouse Electric debido a la devaluación de su negocio nuclear en EU han obligado a Toshiba a iniciar un proceso de reestructuración que podría incluir la escisión y venta de su unidad de memorias flash, una de sus unidades más rentables.
El origen de esas pérdidas está en el incremento de los costes de construcción de nuevas centrales atómicas en EEUU, por lo que Toshiba mantiene un litigio con la anterior propietaria de Westinghouse Electric, British Nuclear Fuels Limited.
Debido a estos problemas financieros, Toshiba ha retrasado también hasta el 11 de abril la presentación de sus resultados del período de octubre a diciembre de 2016.
En el pasado ejercicio fiscal, Toshiba prevé registrar unas pérdidas netas que podrían alcanzar el 1.01 billón de yenes (millón de euros (8.428 millones de euros/ 9.009 millones de dólares), informó asimismo la compañía nipona.
Además, la declaración en quiebra de Westinghouse deja en el aire la construcción de nuevas centrales nucleares que estaba en marcha en Estados Unidos y en Reino unido.