Si no logramos conservar los mares hay poca esperanza de que se pueda mantener la calidad de vida de la humanidad, advierte ecólogo mexicano.
Ciudad de México, 28 noviembre (SinEmbargo).– En el tema de la protección a los mares «el Gobierno de México se encuentra rebasado. Debería haber un esfuerzo mayor y mayores recursos en la protección, investigación y uso adecuado de los mares, porque es fundamental para el bienestar del país». Así aseguró a SinEmbargo Gerardo Ceballos, ecólogo e investigador titular del Instituto de Ecología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).
Entrevistado durante la presentación del libro «Los Mares de México y el mundo», noveno tomo de La Colección Biodiversidad Mexicana, de Fundación Carlos Slim y TELMEX, el científico advirtió que los mares de nuestro país, como sucede con todos los del planeta, están amenazados principalmente por contaminación, vertimiento sustancias tóxicas, sobrepesca y cambio climático global.
«Vertimos una cantidad de desechos tóxicos gigantesca a los mares cada día; en el Río Bravo, el Río Pánuco, el Río Lerma Santiago, la basura, [principalmente] el plástico, se ha convertido en un problema enormemente grave. Las aves marinas y tortugas están muriendo por que comen plástico», detalla.
Ceballos es el autor principal del tomo presentado esta semana en las inmediaciones del Museo Soumaya en la capital y, junto a otros científicos, ha realizado un amplio esbozo de la riqueza natural de los mares del país y del mundo, así como de las graves amenazas que enfrentan en la actualidad .
«Los mares albergan una cantidad de especies desconocida por la ciencia. Son millones de especies. En México son cientos de miles. Somos uno de los cinco países más ricos en diversidad marina de todo el planeta […] Los mares son lo más importante que tiene la tierra para mantener su balance, y si no logramos conservarlos hay poca esperanza de que se pueda mantener la calidad de vida de la humanidad», advierte el científico.
En este sentido, apunta que aunque México ha sido pionero a nivel internacional en el cuidado de los mares, como lo es en la protección de ballenas, lo cierto es que «existen grandes rezagos: solamente el dos por ciento del territorio marino está protegido y deberíamos proteger por lo menos el 17 o 20 por ciento […] Las sanciones relacionadas con los casos de contaminación, por ejemplo, son muy pocas por parte de las autoridades».
El también conservacionista especializado en especies en peligro, encuentra que las acciones más necesarias más urgentes para «ayudar a nuestros mares» son «hacer un gran trabajo de concientización, así como evitar que se siga contaminando y también la sobrepesca». Impulsar la protección, investigación y uso adecuado de los mares por parte de las autoridades también es menester, señaló.
Sobre la importancia de cuidar los océanos en el país, recordó que «somos uno de las tres naciones con mayor diversidad de mamíferos marinos o que tenemos el segundo arrecife de coral más extenso del planeta».
«Si la situación de México fuera similar a lo que enfrenta la tierra, la cantidad de especies marinas en extinción sería alrededor del 30 y 40 por ciento […] Debemos cuidar a nuestros mares. Si logramos salvar a los mares, lograremos salvar a la humanidad», sentenció.