La Fiscalía de Guerrero encontró que 202 de 408 policías viales de Acapulco no se han reportado a sus labores.
México, 28 de septiembre (EFE).- La Fiscalía General del Estado de Guerrero, sur de México, detectó hoy que más de 200 policías viales del balneario de Acapulco aparecen en nómina pero no desempeñan sus funciones.
Al finalizar este viernes un proceso de revisión de personal, armamento e instalaciones de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) de Acapulco, la Fiscalía encontró que 202 de 408 policías viales no se han reportado a sus labores.
«En el caso de los elementos no reportados, la Fiscalía presume que no laboran e investiga su ubicación aunque dichos agentes sí aparecen en nómina, pero no desempeñan sus funciones», indicó en un comunicado el vocero del Grupo de Coordinación Guerrero, Roberto Álvarez Heredia.
Explicó que derivado de la inspección en las instalaciones de la Secretaría, «se encontraron cantidades mínimas con las características propias de la marihuana y cocaína y que fueron puestos a disposición de las autoridades competentes».
En la revisión se encontraron diversas inconsistencias en la documentación correspondiente, como el incumplimiento en los procesos de evaluación y certificación de los cuerpos policiacos al tener solamente 674 aprobados vigentes de 1.309 elementos.
Además 23 servidores públicos que tenían relación directa con los dos mandos operativos a quienes se les ejecutó orden de aprehensión, presentaron sus renuncias voluntarias a sus superiores.
Mientras que 14 elementos operativos y cuatro viales, desde el momento de la ejecución de las ordenes de aprehensión, ya no se presentaron a sus oficinas a laborar, por lo que están bajo investigación.
En relación a la inspección que realizó la Secretaría de la Defensa Nacional del armamento, cartuchos, equipo táctico y radios de comunicación se encontraron diversas irregularidades, como la falta de aproximadamente 200 armas de fuego, de las que se desconoce su ubicación.
También se detectó que 25 vehículos de la Secretaría son ocupados para funciones distintas a la de prevención y de seguridad, siendo que 14 se encuentran adscritos a presidencia y 11 a la misma secretaría.
El martes, el Gobierno mexicano y el del estado de Guerrero tomaron el control de la seguridad en el municipio mexicano de Acapulco, después de que surgieran sospechas que apuntan a la infiltración del crimen organizado en la policía municipal.
La intervención a la SSP se dio después de que la Alcaldesa electa de Acapulco, Adela Román Ocampo, denunciara que se ha retrasado el protocolo de entrega-recepción de esta dependencia a la nueva administración.
Román, del Movimiento Regeneración Nacional (Morena), denunció que el próximo gobierno municipal recibió amenazas de que serían recibidos a balazos.
Con una tasa de 106,63 homicidios por cada 100 mil habitantes, Acapulco se situó en 2017 como la tercera ciudad más violenta del mundo, según el informe anual del Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública y la Justicia Penal.