Juan Bravo-Torres de 39 años de edad mató a apuñaladas a su hija de tres años y buscaba hacer lo mismo con su otra hija de 12 años; sin embargo, fingió estar muerta para que no la atacara y, una vez que el sujeto quedó inconsciente, la menor corrió hasta el McDonald’s donde trabaja su mamá para pedir ayuda.
Los Ángeles, 28 de julio (La Opinión).- Una niña de 12 años fue víctima de un mortal ataque de su padre, pero hacerse la muerta le salvó. Quien no corrió con la misma suerte fue su hermana de tres años, quien falleció tras recibir varias puñaladas.
El autor de esta terrible historia es Juan Bravo-Torres, de 39, quien enfrenta cargos de asesinato e intento de asesinato por el ataque del pasado jueves en la vivienda familiar en Longwood, Florida.
Se suponía que Bravo Torres compareciera a una audiencia este lunes. Sin embargo, su abogado Jeff Dowdy informó que fue sometido a una cirugía de emergencia, por lo que el proceso judicial en la corte del condado Seminole tuvo que ser pospuesto.
Además, el representante legal dijo que le preocupa el estado mental de su cliente y que lo someterán a una evaluación psicológica.
Neighbors have left memorial items at a Longwood home where a father is accused of killing his 3-year-old daughter, critically injuring his 12-year-old daughter and stabbing himself.
Records show Juan Bravo-Torres was arrested in 2011 for domestic violence.
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— Jeff Allen (@News13JeffAllen) July 22, 2022
De acuerdo a las primeras versiones, la niña de 12 años forcejeó con el padre hasta que decidió hacerse la muerta tras recibir varias heridas.
Seguidamente, el padre arrastró a ambas niñas hasta el baño, apagó la luz y se cortó la garganta y las muñecas en un intento de suicidio.
Cuando el hombre quedó inconsciente, la sobreviviente huyó de la casa ensangrentada y caminó una milla hasta el establecimiento McDonald’s en el que trabajaba su madre. Desde allí, un trabajador contactó al 911.
Tras el reporte al 911, la policía llegó a la casa de la familia, derribó la puerta y descubrió a la menor muerta y a Bravo-Torres dentro del baño.
