25 años sin Fred Astaire
Su carrera revolucionó la música y la manera de filmar del siglo XX. Su amistad con el compositor George Gershwin, el acoplamiento de nuevos ritmos y su empeñó en que las escenas musicales se integraran en la trama fílmica de la película, lograron que el movimiento de la cámara siguiera la coreografía de los bailarines y no se rodaran en plano fijo, tal y como se realizaba hasta entonces.
El bailarín con los pies más ágiles quese haya visto en la pantalla grande grabó treinta largometrajes. Desde el inicio de su carrera en 1915 tuvo sus primeras actuaciones en Broadway al lado de su hermana Adelle, hasta la década de los cincuenta, cuando anunció su retiro en los filmes y retomó su oficio teatral. Donde recibió buenas críticas en obras como «On the beach», un drama sobre el conflicto nuclear durante la Guerra Fría. (La hora final – 1959).
Bailarines de la talla de Rudolf Nureyev o Mihail Baryshnikov le han considerado una de sus principales inspiraciones, y es que Astaire es la personificación del genio artista. Combinó creatividad y sentimiento en cada uno de sus pasos de baile, consiguiendo que la danza pareciera tan fácil y despreocupada como el juego de un niño.
Fred Astaire falleció el 22 de junio de 1987 a causa de una neumonía en la ciudad de los Ángeles, California.
Fred Astaire – Puttin’ On the Ritz
Fred Astaire & Ginger Rogers – Too Hot to Handle
“They All Laughed” Shall We Dance (1937)
Yann Tiersen, la amalgama entre el Chanson y el post-rock
El compositor y multi-instrumentalista, Yann Tiersen es uno de los artistas contemporáneos más éxitosos en sus trabajos experimentales. Su virtuosismo lo ha llevado a componer tres bandas sonoras para las películas Amelie , Good bye Lennin! y Tabarly, con las cuales ha fascinado a miles de personas en todo el mundo.
Tiersen logró notoriedad internacional gracias a Amélie, película estrenada en 2001 y que el artista musicalizó con canciones de sus tres primeros discos, ignorados en el momento de su publicación aunque posteriormente, el grueso del público que acude a sus conciertos, aumentó exponencialmente.
El nacido en Brest, Francia ha dedicado su carrera a la búsqueda obsesiva de nuevos sonidos, la experimentación con arreglos complejos buscando satisfacer su voluntad intelectual por medio de el piano de juguete, el acordeón, el violonchelo, el banjo, el clavicordio y la melódica.
Su juventud musical se desarrolló con influencias del rock y por la música clásica, reposando un mundo sonoro influenciado por el pop, la chanson, y las partituras más clásicas.
Su primer álbum «La valse des monstres» fue publicado en 1995, al que han seguido docena y media de discos. Entre ellos, en 2001 lanzaría uno de los discos más importantes de su carrera, ‘L’Absente‘, acercándose a la nueva chanson francesa con la colaboración de Dominique A, Françoiz Breut, Les Têtes Raides, Sacha Toorop, Natacha Regnier y otros muchos compañeros (lo ha hecho también con gente como Stuart Staples de Tindersticks, Liz Fraser de Cocteau Twins o Jane Birkin).
El blues de Nueva Orleans en la voz de Luther Kent
Royal Kent es un icono de la escena blues de Nueva Orleans de los años sesenta conocido por su banda Luther Kent & Trick Bag y sus producciones en solitario. Su música es una mezcla del swing-blues con el típico R&B de Nueva Orleans.
Nació en Louisiana el 23 de junio de 1948, desde su adolescencia tuvo inquietud por la música lo que le valió que a los 14 años debutara bajo el nombre de Royal Kent con la disquera Montel Records con su sencillo I wanna know.
Durante la década de los setenta Luther Kent se unió a la banda Blood Sweet & Tears colaborando como vocalista tras la ausencia de Jerry Fisher y realizando gras con la Big Band Rock sin llegar a grabar un disco.
Luther Kent ha grabado un total de seis discos de estudio y en los últimos años ha actuado también como cantante con la banda de jazz tradicional de Nueva Orleans, «The Dukes of Dixieland», apareciendo en varios de sus discos.