Ciudad de México, 27 de julio (SinEmbargo).– “¡Alerta! Se viene algo más bronco para Veracruz”, se lee en un espectacular colocado en la zona turística de Boca del Río, Veracruz, para promocionar la candidatura independiente de Gerardo Buganza Salmerón a la gubernatura de Veracruz, en el próximo proceso electoral de 2016.
Gerardo Buganza, ex Secretario de Gobierno y ex Secretario de Infraestructura del Gobernador Javier Duarte de Ochoa, uno de los mandatarios más cuestionados por lanzar a su entidad en los últimos lugares de seguridad, transparencia y respeto a la libertad de expresión, también ha emprendido una campaña en redes sociales para promocionar su candidatura independiente.
Luego de su lanzamiento como candidato independiente el pasado 17 de julio, iniciaron las críticas en contra de Buganza por autodenominarse independiente cuando pocas horas antes todavía cobraba en la nómina de la administración pública de Javier Duarte.
“De ese cuate no tengo nada que decir” cortó tajante un panista veracruzano en cuanto se le pidió su opinión sobre Gerardo Buganza.
Por otra parte el Diputado federal Humberto Alonso Morelli, del Partido Acción Nacional (PAN), explicó que es completamente incongruente que se anuncie como un candidato independiente cuando a todas luces mantiene una estrecha relación con el Gobernador Javier Duarte.
“Para nada es creíble, tiene una relación muy estrecha con el Gobernador, con el PRI, vamos él fue secretario de gobierno de esta administración, él se encargaba de la política interna del estado, pues cómo se va a desligar del Gobernador si el ejecutaba su política pública”, dijo el legislador a SinEmbargo.
El Diputado federal panista descartó que los veracruzanos “le compren la idea de que es un candidato independiente”.
“Yo te puedo decir casi con plena seguridad de que Buganza no juega para ganar, juega para dividir, porque supongo que ese el objetivo del PRI de Veracruz, meter a un personaje como Buganza para dividir votos y darle más facilidades a un candidato a modo”, afirmó el Diputado Humberto Alosno Morelli.
Al respecto, el propio Buganza ha dicho: “Nada tengo que ocultar de mi paso por el Gobierno de Veracruz”, dijo. “Cumplí con responsabilidad todas mis tareas”, presumió.
Sin embargo, independientemente de si mantiene vínculo con Javier Duarte o no, por lo menos hay muchas explicaciones pendientes que debe dar el ex Secretario de Gobierno. Por ejemplo, el maletín con 25 millones de pesos que la Procuraduría General de la República (PRD) decomisó ene l aeropuerto de Toluca a colaboradores de Duarte, dinero cuyo origen y destino que no ha sido completamente aclarado.
También está pendiente los casos de periodistas asesinados en Veracruz, que han convertido a la entidad en una de las más peligrosas del país. Según la organización internacional Artículo 19, desde 2011 cinco periodistas permanecen desaparecidos en Veracruz, y 12 comunicadores han sido asesinados durante la administración e Javier Duarte.
¿CANDIDATO INDEPENDIENTE?
En su promoción inicial, Gerardo Buganza utiliza el color violeta, la aleta de un tiburón, el animal característico del puerto de Veracruz y la palabra ¡Alerta! En las redes sociales anuncia que su movimiento está en marcha y tiene “mucha fuerza”. Sus mensajes están dirigidos a la población juvenil y siempre habla de sí mismo como independiente de los partidos políticos tradicionales.
En su presentación disponible en Youtube Gerardo Buganza dice: “No soy bronco, soy más que bronco”, en alusión al Gobernador electo de Nuevo León Jaime Rodríguez Calderón, alias “El Bronco”, ex priista que ganó la gubernatura por medio de una candidatura independiente.
“En el caso de Gerardo Buganza estamos viendo un ‘candidato independiente’ que de independiente tiene lo que yo tengo de astronauta”, afirmó el Diputado panista Humberto Alonso Morelli.
En el mismo video, Buganza dice haberse enfrentado dos veces a las “mafías” de los partidos Revolucionario Institucional y de Acción Nacional, que le han impedido ser Gobernador de la entidad.
Gerardo Buganza fue militante del Partido Acción Nacional de 2004 a 2010, fuerza política que lo postuló a la gubernatura en 2004 y que le dio un escaño en el Senado y dos diputaciones federales en 1997 y 2006.
Como legislador panista Buganza se caracterizó por tener una presencia alejada de las estridencias; sin embargo, también fue crítico de los gobiernos veracruzanos priistas y de la política económica de los mismos.
En 1994 como abanderado del blanquiazul perdió ante el priista Fidel Herrera Beltrán, y en 2010 perdió la candidatura interna panista frente a Miguel Ángel Yunes, personaje cercano al ex Presidente Felipe Calderón Hinojosa y a la ex lideresa magisterial Elba Esther Gordillo.
Como resultado de la negativa a su nominación, Buganza renunció al PAN y abiertamente trabajó para que Yunes no llegara a la gubernatura. “Hace cinco años dije que yo me encargaba de Yunes no ganara la elección de Gobernador en Veracruz, Veracruz no merecía un personaje tan nefasto”, dijo.
Una vez fuera de Acción Nacional, Buganza se incorporó al Gobierno de Javier Duarte de Ochoa en donde colaboró como Secretario de Gobierno un año y posteriormente fue asignado a la Secretaría de Infraestructura; posteriormente regresó a la Secretaría de Gobierno.
Sobre el ex panista y servidor público todavía existen muchas preguntas que conforme se acerque el tiempo del proceso electoral se podrían dar a conocer, como es su propia declaración patrimonial, lo cual permitirá conocer si son fundadas las versiones de presunto enriquecimiento ilícito que ya se comienzas a soltar por parte de sus detractores.
Sin embargo, el problema para este “bronco” veracruzano podría ir más allá de las críticas sobre su independencia. En días recientes, los congresos de Chihuahua, Sinaloa, Tamaulipas y Veracruz, reformaron sus códigos electorales para dificultar el acceso a una candidatura independiente.
En el Congreso de Veracruz, los legisladores avalaron que los aspirantes sin partido deban reunir las firmas del 3 por ciento de los ciudadanos inscritos en el listado nominal actualizado, aún cuando en la elección federal solo necesitan el por ciento.