La llegada del verano, por lo general, remite a un ambiente festivo y lleno de alegría. Sin embargo, dejando de lado los estereotipos, puede ser el escenario ideal para historias llenas de drama. Si a lo anterior se le añade la pasión asociada a las elevadas temperaturas, los relatos surgidos de esta mezcla pueden dar un resultado más interesante que las típicas historias de amor ocurridas durante el estío.
Pasión, juventud y verano son los factores que se mezclan en estos tres filmes. Los protagonistas, por su parte, se desenvuelven en esta amalgama llena de contradicciones, pero que hará que los espectadores pasen un buen rato durante la primera semana de un verano que apenas está iniciando.
Sommaren med Monika
Sommaren med Monika1953
Ingmar Bergman
Suecia
Drama, romance
Harry Lund, un joven de 19 años que trabaja en un almacén, conoce a Mónica, de 17, quien trabaja en un almacén de vegetales. La jovencita entabla una conversación con Lund al verlo en un café y después de un tiempo se enamoran. Los dos son hostigados en su empleo debido a su edad y, finalmente, Mónica abandona su casa luego de tener una discusión con su padre, mientras que Harry deja su trabajo después de discutir con su jefe. Sin nada que los ate a la ciudad, toman el pequeño bote de Harry a un archipiélago para pasar unas semanas a solas.
My Summer of Love
My Summer of Love2004
Pawel Pawlikowski
Reino Unido
Drama
Adaptación de la novela homónima de Helen Cross, publicada en 2002. Es verano en Yorkshire, Mona y Tamsin, dos chicas de 16 años, se conocen y se hacen amigas a pesar de pertenecer a diferentes clases sociales y ser muy distintas entre sí. La pasión surge entre ambas jóvenes contrastando con el escenario de misticismo religioso profundo del poblado en el que se desarrolla la historia.
The Wackness
The Wackness2008
Jonathan Levine
Estados Unidos
Comedia, drama
La historia ocurre en Nueva York, en el verano de 1994. Relata los andares de Luke Shapiro, un joven traficante de droga y Jeffrey Squires, un psiquiatra adicto que está aburrido de su vida. Shapiro le canjea marihuana a Squires por sesiones de terapia con el doctor, de cuya hija, Stephanie, comienza a enamorarse casi simultáneamente.
