El sujeto le dijo al Presidente de los Estados Unidos «¡Vamos Brandon!» una forma encubierta —y ya popular entre la derecha estadounidense— para insultar a Joe Biden.
Ciudad de México, 26 de diciembre (RT).- Un tradicional programa navideño de la Casa Blanca en el que participan niños, terminó de forma incómoda el viernes, cuando un padre le dijo al mandatario estadounidense Joe Biden: «¡Vamos Brandon!» —una frase que se ha convertido en un insulto encubierto— durante una llamada telefónica.
El Presidente y la Primera Dama Jill Biden estaban respondiendo a las llamadas durante el programa navideño anual ‘NORAD Tracks Santa’, cuando un padre de Oregón, identificado como Jared, dijo: «Feliz Navidad y ¡vamos, Brandon!», después de que sus hijos le dijeran al jefe de Estado los regalos que querían para las fiestas.
La frase se hizo popular durante una carrera de automóviles NASCAR en Alabama en octubre pasado. El ganador, llamado Brandon Brown, estaba siendo entrevistado por una periodista mientras que el público en las gradas coreaba lemas contra el nuevo Presidente estadounidense. La reportera surgirió que estaban gritando «¡Vamos, Brandon!», pero en realidad lo que gritaban era «Jódete Biden» («Fuck Biden»). Al final, la frase ha quedado en los círculos de derecha de Estados Unidos y se ha utilizado para criticar al mandatario, mayormente en las redes sociales.
CALLER: "Merry Christmas and Lets Go Brandon:"
BIDEN: "Lets Go Brandon, I agree" pic.twitter.com/K8PpzceB3K
— Greg Price (@greg_price11) December 24, 2021
Según los periodistas que asistieron el evento, es posible que Biden no entendiera la intención de su interlocutor, porque luego respondió: «¡Vamos, Brandon! Estoy de acuerdo». La administración de la Casa Blanca declinó hacer comentarios sobre el incidente.
Entretanto, una reciente encuesta de Gallup (una empresa estadounidense de análisis y asesoría) asegura que solo el 5 por ciento de los que se consideran republicanos aprueban la gestión de Biden como Presidente. Asimismo, señala que la tasa de aprobación general del mandatario cayó al 43 por ciento.