México está utilizando un fondo de 100 millones de dólares para implementar los primeros programas del Plan de Desarrollo Integral para Centroamérica, pero se necesitarán fondos internacionales para concluir con el plan de 6 años.
Por Eduard Ribas i Admetlla
México, 26 dic (EFE).- El Gobierno de México prevé que en 10 meses se agotarán los 100 millones de dólares para el Plan de Desarrollo Integral para Centroamérica, por lo que buscará que en 2020 otros países aporten recursos, dijo este jueves en entrevista con EFE la titular de la Amexcid, Laura Elena Carrillo.
«Calculamos que el dinero nos va a durar 10 meses donde ya están los depósitos. Lo que queremos es que durante este proceso, nuestros socios cooperantes puedan ver buenos resultados», reveló Carrillo, directora de la Agencia Mexicana de Cooperación Internacional para el Desarrollo (Amexcid).
Carrillo explicó que México acudirá a fondos de cooperación internacional y aseguró que ya han mostrado su interés en este programa que busca frenar la migración forzada en la región países de la Unión Europea como Francia, así como Estados Unidos, Canadá, Singapur, Corea del Sur y Japón, entre otros.
El pasado mayo, el Gobierno mexicano y la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) presentaron un plan de seis años para desarrollar el sureste mexicano, El Salvador, Guatemala y Honduras ante el incremento del flujo de migrantes de la región, que tuvieron que dejar sus hogares en el último año.
Por el momento, el Gobierno federal está utilizando los 100 millones de dólares de un fondo de recursos conocido como el Fondo México para implementar los primeros programas, pero va a requerir más recursos.
«Una vez se termine, a menos que la Cámara de Diputados quiera volver a financiar el fondo, la idea del próximo año en adelante es conseguir fondos internacionales con socios cooperantes con los que ya trabajamos», dijo la directora del AMEXCID.
DOS PROGRAMAS EMBLEMA
El plan en Centroamérica ha comenzado en los últimos meses con dos programas que han tenido éxito en territorio mexicano, uno de reforestación conocido como Sembrando vidas y otro de becas para insertar a la juventud al mercado laboral, llamado Jóvenes Construyendo el Futuro.
Con el primer programa se entregan 250 dólares mensuales a propietarios de terrenos que quieran refortestarlos o hacer plantaciones, mientras que en el segundo se dan 180 dólares mensuales a jóvenes para que se formen dentro de alguna empresa.
Ambos ya han empezando a funcionar en los últimos meses en Honduras y El Salvador, mientras que Guatemala está a la espera de que asuma el poder el próximo Presidente, Alejandro Giammattei, el 14 de enero próximo.
«La meta es beneficiar a 20 mil personas en cada país. Generar 60 mil empleos», explicó Carrillo, quien señaló que en un futuro el plan se debe expandir con la financiación de infraestructuras y programas de salud y educación.
«La cooperación internacional se está haciendo como nunca se había hecho, estamos sentando ejemplo y eso nos enorgullece mucho», dijo Carrillo, quien sostuvo que «por primera vez cuatro países se ponen de acuerdo para armar estrategias conjuntas de desarrollo».
MITIGAR LA MIGRACIÓN
Aunque el Presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, impulsó un plan de desarrollo para frenar el fenómeno migratorio, la directora del AMEXCID avisó de que «va a ser muy difícil encontrar una relación directa entre un programa particular y la reducción de la migración».
«La situación migratoria es un fenómeno muy complejo que tiene muchas variables y hay muchas razones por las que alguien decide migrar», expresó Carrillo, que cuenta con un doctorado en Desarrollo Regional.
Durante esta segunda mitad del 2019, México consiguió reducir cerca de un 60 por ciento el flujo migratorio que atraviesa su territorio con destino a Estados Unidos, aunque la directora del AMEXCID no atribuyó esta reducción al plan de desarrollo sino a «temas económicos y de seguridad».
Más concretamente al despliegue de la Guardia Nacional en las fronteras de México acordado entre el Gobierno mexicano y el estadounidense durante una crisis arancelaria sucedida a mediados del 2019.
En ese acuerdo, México aceptó aumentar sus controles migratorios pero arrancó de Washington el compromiso de colaborar en el desarrollo de Centroamérica para atender las causas de origen de la migración forzada.
Estados Unidos no se ha sumado directamente al plan de desarrollo de México y la Cepal, pero ha lanzado recientemente la iniciativa «América Crece» para crear empleo en la región, la cual puede complementar el plan mexicano, dijo Carrillo.
«La idea es que sumen y vayamos fortaleciendo la cooperación internacional para generar un gran desarrollo en la región», sentenció.
