«No afecta a los consumidores», según dijo un portavoz de la compañía a Dpa. Solo después de seis o siete años de uso podría repercutir en la prestación de la batería. Volkswagen está estudiando cómo actualizar el software durante las inspecciones rutinarias de los vehículos.
Hannover (Alemania) 26 nov (dpa/EFE).– El fabricante de automóviles Volkswagen confirmó hoy que uno de los programas informáticos en los motores que fabricó durante la segunda mitad de 2015 presentan problemas en la recarga de sus baterías.
La empresa, inmersa desde finales de octubre en un escándalo por la manipulación de emisiones en millones de sus autos a través de softwares fraudulentos, confirmó así una información del diario alemán Die Welt.
Las baterías de estos motores fallan en la recuperación de energía durante el frenado, un sistema de generación eléctrica que aprovecha la energía cuando se usan los frenos.
«No afecta a los consumidores», según dijo un portavoz de la compañía a dpa. Solo después de seis o siete años de uso podría repercutir en la prestación de la batería. Volkswagen está estudiando cómo actualizar el software durante las inspecciones rutinarias de los vehículos.
El martes pasado, las autoridades alemanas informaron que la Fiscalía de la ciudad alemana de Braunschweig investiga al gigante automotor alemán también por supuesto fraude fiscal.
La investigación se enmarca dentro del escándalo de la mayor automotriz de Europa por la manipulación de las emisiones de los tubos de escape de sus motores diésel, informó el fiscal superior, Klaus Ziehe.
“Actualmente hay cinco acusados sobre los que hay una sospecha inicial de delito”, indicó Ziehe. Estas personas provienen del ámbito del grupo VW, agregó. Se trata de una investigación adicional abierta en relación a la manipulación de los valores de dióxido de carbono, informó.
Las emisiones de dióxido de carbono de un automóvil es un criterio importante para calcular el impuesto de circulación que deben pagar los usuarios. Si –como informó VW– se han dado valores más bajos, entonces existe un correspondiente perjuicio al Estado por un pago de impuestos bajo. “Ésta es la consideración más importante”, apuntó.
Las autoridades de Braunschweig ya abrieron una investigación contra VW por el escándalo de la manipulación de las emisiones de óxido nítrico en motores diésel y llevaron a cabo registros.
A principios de noviembre, la automotriz informó que también había “irregularidades” en las emisiones de dióxido de carbono. VW detectó que en la certificación de dióxido de carbono de algunos modelos se dieron datos de CO2 demasiado bajos, y con ello cifras demasiado bajas de consumo, afectando también a los motores de gasolina.
Con esto, el escándalo de VW alcanza una nueva dimensión también a nivel legal un día después de que la compañía reconociera que también los grandes automóviles con motores diésel de VW, así como de sus filiales Audi y Porsche cuentan con un software ilegal para manipular los valores de las emisiones.
MULTA MILLONARIA
El Gobierno de Corea del Sur impuso a Volkswagen una multa de 11.5 millones de euros y ordenó la llamada a revisión de 125 mil vehículos tras concluir que el fabricante alemán falseó las emisiones con su software fraudulento en el país asiático.
Volkswagen usó en Corea del Sur en su modelo Tiguan el llamado «dispositivo manipulador» para minimizar intencionadamente las emisiones de gases contaminantes durante las pruebas medioambientales, según el resultado de una investigación de más de un mes publicado hoy por el Ministerio de Medio Ambiente de Seúl.
El Ministerio sigue investigando si la firma alemana también utilizó esta técnica en otros modelos de Volkswagen y Audi, aseguró en un comunicado de prensa.
Medio Ambiente también anunció que ha impuesto una multa de 12.3 millones de dólares a Volkswagen.
Asimismo, ha ordenado la llamada a revisión de 125.522 vehículos de 15 modelos, entre ellos los Beetle y Tiguan de Volkswagen y los Q5, Q3 y A4 de Audi, y ha decretado la suspensión de ventas de nuevos automóviles, según el comunicado.
Volkswagen deberá presentar hasta el 6 de enero un plan detallado de la revisión de sus vehículos, que incluya una solución para mantener las emisiones en los límites legales tras eliminar el software fraudulento sin modificar la eficiencia del combustible, según el Ministerio de Medio Ambiente
El organismo estatal anunció que también llevará a cabo una investigación similar que afectará a otros 16 fabricantes surcoreanos y extranjeros para comprobar si han usado técnicas similares al «dispositivo manipulador» en sus automóviles diésel.
También adelantó que a partir de septiembre de 2017 decretará una norma para evitar la manipulación de los resultados de emisiones en automóviles de tamaño pequeño y mediano.
Por otra parte, ya suman más de mil los propietarios de vehículos Volkswagen en Corea del Sur que han demandado a la compañía para exigir compensaciones.