Nairobi, 26 nov (EFE).- La histórica visita de dos días que el Papa Francisco comenzará el domingo en la República Centroafricana (RC) puede ser clave para acabar con la violencia en que vive inmerso el país, que desde el 25 de septiembre ha visto morir a al menos 100 personas en enfrentamientos entre cristianos y musulmanes.
Así lo ha afirmado hoy el colectivo internacional de defensa de los derechos humanos Human Rights Watch (HRW), que pide al Pontífice que contribuya a acabar con la impunidad para quienes cometen unas atrocidades que han provocado también la huida de sus casas de más de 35 mil personas en dos meses.
«La visita del Papa Francisco a Bangui (capital del país) es un momento clave para que una gran figura religiosa condene la violencia de todos los bandos, pida tolerancia y haga un llamamiento para que los responsables sean llevados ante la justicia», dijo en un comunicado Lewis Mudge, investigador para África de HRW.
HRW ha recordado que el distrito de Bangui de mayoría musulmana, conocido como «Kilómetro 5, es el lugar en torno al que se han producido la mayoría de apuñalamientos, degollamientos o tiroteos con los que musulmanes y cristianos se han matado unos a otros en las últimas semanas.
Rodeado de fuertes medidas de seguridad ante la situación de caos que vive el país, el Papa Francisco tiene previsto visitar la mezquita central del «Kilómetro 5», así como un campo de desplazados por la violencia.
Además, el Pontífice celebrará una misa en un estadio de la capital, y una vigilia para pedir la paz en la catedral de Bangui.
El «Kilómetro 5» es el único barrio musulmán que queda en Bangui, después de que más de 120 mil personas de fe mahometana huyeran de la capital desde que estalló el conflicto sectario en marzo de 2013, cuando la milicia rebelde de mayoría musulmana Séléka tomó el poder en un golpe de Estado y empezó a perpetrar violaciones de los derechos humanos.
Como respuesta, una milicia cristiana conocida como Anti-balaka organizó la resistencia contra los antiguos rebeldes, al tiempo que llevaba a cabo violentas represalias contra ciudadanos musulmanes en la capital y en el oeste del país.
Miembros de grupos de autodefensa musulmanes han cometidos muchos de los asesinatos que se han producido en Bangui en las últimas semanas, según HRW.
Los Anti-balaka también participaron en esta última ola de violencia en Bangui, aunque a menor escala que en otras ocasiones. Mientras tanto, la milicia cristiana sigue atacando a los musulmanes fuera de la capital.
El papa Francisco llegará procedente de Uganda a la RC, en la que es su tercera y última escala de una gira africana que comenzó el miércoles en Kenia.