Miembros de la organización certificaron que este tipo de construcción, que se realizó en Virginia Beach, al sur de Miami, se erigía como el más alto del mundo al tener 15.87 metros de alto.

Desde noviembre del año pasado, Río de Janeiro (Brasil) ostentaba este título con una obra de 11.63 metros.

Lilian Cortés, una argentina afincada en Miami, dijo estar «fascinada» ante la «obra de arte» en la que doce artistas han estado trabajando para esculpirla.

«Lo escuché por televisión y vi que estaban construyendo este monumento. Me parece una idea maravillosa que atraerá a muchos turistas», apuntó la mujer.

La obra, sin embargo, no quedará permanentemente en este enclave de Cayo Vizcaíno, ya que está previsto su disolución en un plazo de tres semanas.

Para la construcción de este castillo de arena se han necesitado más de mil 800 toneladas de arena, que se han traído expresamente con esta finalidad.

El levantamiento del castillo ha sido auspiciado por la compañía aérea Turkish Airlines, que ideó esta campaña con motivo de la puesta en marcha de su nueva ruta entre Estambul (Turquía) y Miami.

El castillo está ambientado en las «maravillas» del mundo, por lo que los vecinos y turistas que visiten esta zona de Miami podrán reconocer algunos de los monumentos que se dibujaron como la emblemática Torre Eiffel o la gigantesca muralla china.

«Vi el Taj Mahal, el Big Ben, la estatua de la libertad, la torre de Pisa, el Coliseo (romano) y otras cosas maravillosas», comentaba «fascinada» Camila Montoya, una joven colombiana residente en el sur de la Florida.