Monterrey, 26 Ago (Notimex).- El director de cine Arturo Ripstein impulsó a los estudiantes del programa académico de Licenciado en Producción Cinematográfica Digital de la Universidad de Monterrey, durante una charla que sostuvo con ellos, a “persistir sin esperanza”.
“Lo único que creo que tiene sentido cuando uno inicia una carrera tan completa como esta (de cine) es no pensar que va a haber una recompensa, nada más pensar en el trabajo de uno, es el mejor consejo”.
El director de cine y guionista, hijo del productor Alfredo Ripstein Jr., tuvo el encuentro con estudiantes en el Aula de Crítica del Centro Roberto Garza Sada de Arte, Arquitectura y Diseño, como parte de las actividades del Festival Internacional de Cine de Monterrey, donde recibió un reconocimiento por su trayectoria.
Durante el evento, Ripstein habló de sus inicios en el cine, su gusto por el melodrama y el plano-secuencia, de su fascinación cuando asistió a algunos rodajes de Luis Buñuel, sus preferencias para trabajar con escritores mejor que con guionistas y confesó, en tono irónico, que, al ver las cosas que ha hecho, “se arrepiente de absolutamente todo”.
“A mí lo que más divierte es el rodaje, es lo que me impulsa a seguir adelante; Truman Capote decía que Dios te da un don y un castigo: el don que me dio a mí es hacer películas y el castigo es tener que verlas”, señaló.
El director señaló que su relación con los actores es tan creativa como con los escritores, ya que al momento de rodar, prefiere exponerles un problema, plantearles una situación, para que después ellos sean los que las resuelvan.
“El cine consiste en rodearse de la mejor gente posible y dejarlos hacer su trabajo, porque ellos lo hacen y uno nada más lo aglutina”, sentenció.
Arturo Ripstein ha sido reconocido a nivel internacional como director por las películas “Tiempo de morir”, “El castillo de la pureza” y “El coronel no tiene quién le escriba”, además de su colaboración con escritores como Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes y con actores mexicanos destacados.