Durante un mitin en el Hemiciclo a Juárez, los padres de los 43 advirtieron que continuarán con su exigencia para saber qué sucedió con sus hijos, aún cuando el GIEI se vaya del país, pero también advirtieron que unirán todas las fuerzas del país que luchan por los miles de desaparecidos. «Ni crea que vamos a descansar, que nos vamos a ir a nuestras casas, vamos a seguir luchando. Nos vamos a encargar de unir la fuerza», dijeron.
Ciudad de México, 26 de abril (SinEmbargo).- Los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa, advirtieron hoy a 19 meses de la desaparición de sus hijos y a unos días de que el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) deje el país, que no cesarán su exigencia y que continuarán luchando contra “las mentiras, el engaño, contra una verdad histórica que nunca ocurrió”. Además exigieron al Presidente Enrique Peña Nieto que los reciba lo más pronto posible para definir el mecanismo de seguimiento para el caso.
Los padres de los 43 arribaron al Hemiciclo alrededor de las 7:30 de la tarde para encabezar un mensaje a los 19 meses de la desaparición de sus hijos.
Vidulfo Rosales, abogado de los padres, inició el mitin en el Hemiciclo a Juárez.
«El Gobierno creía que a 19 meses los padres estarían en sus casas, pero se equivocó, aquí estamos, contra las mentiras, el engaño, contra una verdad histórica que nunca ocurrió», dijo.
El abogado indicó que una vez que el GIEI se vaya del país, los padres de los 43 continuarán exigiendo justicia.
«Si piensan que nos vamos a retirar derrotados, tampoco, con lo que nos dejan los expertos les vamos a exigir a la Procuraduría que continúe con las investigaciones», indicó.
Cristina Bautista Salvador, madre de uno de los jóvenes, agradeció a las personas que salieron a marchar.
«Debemos estar unidos, porque hay miles de desaparecidos. Le exigimos a Peña Nieto que nos reciba lo más pronto posible, para definir el mecanismo de seguimiento», dijo.
Bautista Salvador resaltó que, al no asistir al informe del GIEI, el Gobierno aceptó que les mintió.
«Ni crea que vamos a descansar, que nos vamos a ir a nuestras casas, vamos a seguir luchando. Nos vamos a encargar de unir la fuerza», agregó.
Felipe de la Cruz, vocero de los padres, aseguró que no se rendirán.
«No le estamos pidiendo, le estamos exigiendo porque es su obligación, no que nos asesinen, queremos el mecanismo de seguimiento que propone la Comisión Interamericana», señaló.
Por su parte, Emiliano Navarrete, padre de otro de los jóvenes, pidió al Gobierno mexicano que respete a los familiares de los desaparecidos.
«Duele pensar cómo estarán nuestro jóvenes que fueron privados de su libertad. Nosotros campesinos, ni siquiera nos imaginábamos este Gobierno inhumano. Le pedimos al Presidente si tiene dignidad como hombre, no como Presidente, que nos dé la cara y responda por este señor Tomás Zerón o que nos los deje a los padres, que nos dé su cabeza, que no los entregue aquí», dijo.
Navarrete indicó que llegarán hasta las últimas consecuencia, «aunque nos den en la madre, no nos vamos a regresar a nuestras casas».
Han pasado 19 meses desde una de las noches más terribles de México. Decenas de marchas y miles de reclamos después, la petición sigue siendo la misma: saber qué pasó con los 43.
Y la respuesta hoy, cuando miles se congregaron otra vez, es la misma: el Gobierno de México tiene una versión que pocos creen y a la que le falta lo principal: evidencia.
La marcha por los 19 meses de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa partió esta tarde con una caravana encabezada por los padres de los jóvenes del Ángel de la Independencia.
Durante la movilización sobre Paseo de la Reforma, una de las madres recriminó: «Hasta cuándo Enrique Peña Nieto nos vas entregar nuestros hijos, tope donde tope. Tu dijiste que nos apoyarías y nos estás despretigiado, nos estás dando puñaladas por la espalda».
La mujer acusó al Gobierno de Peña Nieto de tener retenidos a los normalistas.
«Entréganos a nuestros hijos, ya basta Peña Nieto, vamos a luchar y a ser tu piedra en el zapato hasta que nos entregues y liberes a nuestro hijos», agregó la madre.
El contingente de padres, acompañados por algunos movimientos como Atenco y de la Preparatoria Popular Obrera, avanzó por Avenida de la Reforma hacia el Hemiciclo a Juárez.
Los padres exigieron que el GIEI continúe acompañándolos en las investigaciones que se realizan en torno a los 43 normalistas.
Otro de los padres acusó que durante la noche de los hechos hubo coordinación entre diversas corporaciones policíacas.
«Estamos aquí manifestándonos a 19 meses de desaparición forzada. Participaron la Policía de Iguala, de Cocula, de Huitzuco, Policía Federal y el Ejército. Está claro que hubo una coordinación al más alto nivel ese 26 y 27 de septiembre», dijo.
Los padres acusan al Gobierno de pretender ocultar lo que realmente sucedió en Iguala con su «verdad histórica».
«El Grupo Interdisciplinario de expertos ya demostró que los jóvenes no fueron quemados en el basurero de Cocula. Por eso queremos que los expertos se queden porque ya estamos cansados», indicó otro de los papás.
El contingente se detuvo frente a las oficinas de la PGR para exigir la verdad sobre lo sucedido con sus hijos.
«De ese lugar salió la verdad histórica, no podemos quedarnos callados, hoy sabemos que Zerón de Lucio sembró las bolsas en el Río San Juan. De esas oficinas salió la orden de desaparecer a los jóvenes», acusaron los padres. Por ello, los manifestantes exigieron cárcel para el ex Procurador de la República Jesús Murillo Karam y para Tomás Zerón.
Los familiares exigieron también a la Procuradora Arely Gómez González que atienda el informe del GIEI y que siga las recomendaciones plasmadas en el documento.
«Que le quede claro a Arely Gómez que le queda poco tiempo para que nos diga la verdad», dijo uno de los padres.
La movilización realizó una parada en el monumento a los 43.
En el lugar recriminaron: «Ya vimos como son capaces de manosear las investigaciones. Ya no hay cómo se puedan defender para que creamos en la Procuraduría. Los expertos pueden decir misión cumplida, los descubrieron en el manoseo de las investigaciones».
«Yo nada mas le quiero decir al Gobierno que no creemos en él, es una vergüenza para México», agregó una de las madres.
«El gobierno un día nos dijo que superáramos el dolor, yo le digo que supere al basurero de Cocula», añadió.
La movilización de hoy se da apenas unos días después de que el pasado domingo, el Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI) presentó su informe final sobre el caso Iguala, donde platearon distintas interrogantes, abrieron muchas dudas, lagunas y sospechas que no sólo alertan sobre la posibilidad de que evidencia clave fuera alterada, sino que también marca rutas que permitirían saber el destino de los 43 normalistas secuestrados y desaparecidos entre la noche del 26 y la madrugada del 27 de septiembre de 2014.
En el documento, el Grupo de Expertos destaca que esa noche en Iguala fuerzas de seguridad y criminales llevaron a cabo un ataque coordinado contra los normalistas de Ayotzinapa que se extendió mediante un cerco de 80 kilómetros para impedir la salida de los jóvenes de la ciudad. En este punto, el informe habla sobre la existencia de una persona identificada como “caminante” con quien se comunicaron varios de los policías en distintos momentos en “horas críticas”. De este personaje no se sabe nada.
De lo que tampoco se conoce es sobre el móvil del quinto autobús que una parte de los normalistas había tomado y que no estaba siendo investigado.
El GIEI también cuestionó la alteración de las escenas del crimen, como es la visita a escondidas que hizo el titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC), Tomás Zerón de Lucio, en la zona aledaña del Río San Juan un día antes de que se hallará los únicos restos humanos, así como la repentina aparición de 42 casquillos y la desaparición de una moto de personal militar que simplemente se extravió.
Ayer, en una conferencia de prensa en la Ciudad de México, los padres de los normalistas acusaron al gobierno de impedir que el GIEI investigara lo que ocurrió con sus hijos. Y acusaron que el caso ha evidenciado “lo podrido” que está el sistema Judicial de México.
Los padres sentenciaron que el informe del grupo de expertos despejó las dudas de que pruebas fueron sembradas. Además exigieron el cese de Tomás Zerón como titular de la Agencia de Investigación Criminal (AIC) por manipular las pruebas de lo sucedido en Iguala.
Durante el mensaje que ofrecieron ayer lunes, los padres expresaron su agradecimiento al GIEI, por coadyuvar en la investigación y ofrecer datos veraces, a diferencia de las autoridades, a las que acusaron de no cumplir con sus compromisos. Incluso recriminaron al Presidente Enrique Peña Nieto que rompiera su primer compromiso, que hizo durante la reunión que sostuvo con los padres en octubre de 2014, de que se iba a saber la verdad sobre el caso.
“Hoy queremos recordarle que el compromiso era que si no tenía la capacidad para darnos respuesta se tenía que ir, porque no puede ser que alguien inepto siga representando a México. Son miles y miles los desaparecidos”, dijo Bernardo Campos, padre del normalista José Ángel Campos.
“Se van los expertos no porque no hayan cumplido su objetivo, sino porque el Gobierno no les permitió hacerlo. Osorio Chong en Acapulco se comprometió a dar una prórroga si no se llegaban a conclusiones, hoy dice de forma descarada que se vayan los expertos”, recordó Campos.
Por otra parte, en entrevista con SinEmbargo, los expertos del GIEI Alejandro Valencia y Ángela Buitrago, alertaron, a unos días de dejar México, que su mayor preocupación es la seguridad y el futuro que les espera a los padres de familia.
No sólo por la falta de justicia o de al menos avances en la investigación del crimen, sino por los potenciales riesgos de que sean sometidos a prácticas de criminalización o revictimización.
Hoy mismo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) hizo un llamado al Gobierno mexicano para que siga el reporte final del GIEI en torno al caso Ayotzinapa.
La ONU dijo hoy que son preocupantes los diversos obstáculos y problemas que encontraron los expertos designados por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para investigar la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, lo que les “impidió explorar algunas líneas de investigación”.
