Lindsey Graham dijo en su cuenta de Twitter que «toda propuesta política que aumente el precio de la Corona, el tequila y las margaritas es una muy mala idea», para añadir en «spanglish»: «Mucho sad (triste, en inglés)».
Simply put, any policy proposal which drives up costs of Corona, tequila, or margaritas is a big-time bad idea. Mucho Sad. (2)
— Lindsey Graham (@LindseyGrahamSC) 26 de enero de 2017
Washington, 26 ene (EFE).- El Senador republicano, Lindsey Graham, se opuso hoy en tono jocoso a la propuesta del presidente estadounidense, Donald Trump, de imponer aranceles a México porque subirán el precio de «la Corona, el tequila y las margaritas».
El senador, uno de los más veteranos en la cámara alta, aseguró en su cuenta de Twitter que «toda propuesta política que aumente el precio de la Corona, el tequila y las margaritas es una muy mala idea», para añadir en «spanglish»: «Mucho sad (triste, en inglés)».
En un tono más serio el senador, quien también fue aspirante a la candidatura presidencial republicana con la que se hizo Trump el pasado verano, apuntó: «seguridad fronteriza, sí; aranceles, no. México es nuestro tercer socio comercial (…) Son una gran barrera al crecimiento económico».
En los últimos dos días, Trump firmó una orden ejecutiva para comenzar la construcción de un «muro» en la frontera con México y dijo que el vecino del sur pagará la construcción, algo que llevó al presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, a suspender su vista a la Casa Blanca prevista la semana próxima.
En una extraña maniobra, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, dijo hoy que para obligar a México a pagar por el coste del muro podrían imponer un arancel del 20 por ciento a las exportaciones, algo que luego matizó que se trataba solo de un ejemplo.
Trump también ha prometido renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), firmado por EU, Canadá y México hace más de dos décadas.
El senador republicano de Arizona John McCain aseguró hoy que renegociar el TLCAN no es mala idea si se hace con la intención de modernizar el tratado, pero no si se aborda como un intento de aumentar aranceles a los vecinos norteamericanos.
«El libre flujo de bienes ha sido la fundación de la política económica estadounidense durante décadas y un factor clave en nuestra grandeza y prosperidad. No deberíamos tener que reaprender las lecciones de la historia», advirtió el senador, un abierto opositor de Trump dentro del Partido Republicano.