El tema de cómo será la vida en el futuro, sin periódicos, con un sexo que va más allá de hombre y mujer, sin teléfonos públicos, son los paradigmas en donde la FIL Guadalajara, su presidente Raúl Padilla López, la directora Marisol Schulz Manaut y sumado a ello el coordinador de Difusión Cultural de la UNAM, Jorge Volpi, están más que preocupados y conscientes de que deben buscar respuestas. Por eso, el foro De Muro a Muro, que ya empezó en la UNAM, seguirá a cargo de la UDG, en el marco de la FIL Guadalajara.
Ciudad de México, 25 de noviembre (SinEmbargo).- Hoy, a las 19 horas, se reunirán Eufrosina Cruz , Gilles Lipovetsky , Rob Riemen, para hablar de Solidaridad y corresponsabilidad, en el marco del foro Los acosos a la civilización. De muro a muro, organizado por la UNAM y la UDG.
¿Cómo se encuentran y qué discuten el mayor filósofo francés, que más ha tratado la sociedad liberal y moderna, con el holandés que está convencido de reflotar la nobleza de espíritu –sobre todo a partir de Thomas Mann- y con la primera mujer que llegó al Concejo de Oaxaca que lucha sin cesar por los derechos de las indígenas?
Ese es el debate y el carácter del intercambio, que sigue con Democracia e Internet (Rossana Fuentes Berain y Andrew Rojecki) y mañana con Inequidad y populismo, a cargo de Gary Gerstle , Juan Pardinas y Alicia Bárcena.
“El foro surge de dos preocupaciones absolutamente coincidentes, una de la UDG y otra de la UNAM. Estamos viviendo una época que es un cambio de paradigma, en el político es el más comentado y el más evidente. De pronto, cuando vivíamos en lo que creíamos era el fin de la historia, había un solo modelo que era la democracia liberal con la economía de mercado, surgieron el nuevo auge de los populismos, de izquierda y de derecha, que de pronto nos llevan a las pesadillas del siglo XX”, dice su organizador, el periodista y escritor Nicolás Alvarado.
“También estamos viviendo la revolución industrial, que muchas personas como tú y como yo que pensábamos que íbamos a trabajar de determinada manera, vemos cómo todo ha cambiado. Ya no van a existir los cheques, ni los periódicos, ni los teléfonos públicos, ni las revistas, ni la televisión, los procesos industriales son automatizados de distinta manera, que los procesos de comunicación se van a dar al margen de los medios de comunicación, lo cual resulta muy asombroso”, agrega.
“Resulta también muy sorprendente, que todo lo que creíamos saber sobre el sexo y el género y no nos atrevíamos a preguntar, ya había cambiado por completo. De pronto descubrimos que la identidad sexual se ha multiplicado, para una generación que a menudo las ve como optativas no determinadas biológicamente, igual que la nacionalidad, es decir, todos los paradigmas relacionados con la identidad”, afirma.
¿Dónde estamos parados? Todos estamos asustados, confusos y fue así como la UDG con la UNAM se unieron para hacer el foro Los acosos a la civilización. De muro a muro, que tuvo ya cuatro días en la ciudad de México e iniciará otros tres días en Guadalajara, en el marco de la Feria Internacional del Libro.
–¿Va a haber debate o sólo exposiciones?
–Va a haber exposiciones y debates. Los formatos serán lo suficientemente flexibles para que después de un primer saque, por decirlo así, se arme una discusión. Hay encuentro de personajes muy distintos. Alicia Bárcena, por ejemplo, viene de la CEPAL, que tiene una visión socialista y se encontrará con Juan Pardinas, que tiene una visión francamente liberal. O de pronto Antonio Villarraigosa, de Los Ángeles, con una postura demócrata y Daniel Jadue, de Chile, que es comunista. Es decir, de pronto se van a producir estas tensiones intelectuales que a nosotros nos parece que enriquecen el debate.
–¿Qué hacen los escritores ahí, como Irvine Welsh o Gilles Lipovetsky?
–De alguna manera si para algo ha servido la literatura, desde Balzac o a Dostoievski, es como un dispositivo para entender la realidad. ¿Sabrá alguien más de Edimburgo que Irvine Welsh? ¿Alguien desde el ensayo filosófico ha pensado más las democracias contemporáneas que Gilles Lipovestky? La idea es tener una buena mezcla de personas surgidas de distintas áreas del pensamiento, hay políticos, hay narradores, hay filósofos, hay poetas, hay periodistas, hay gente que se ha dedicado más a cultivar el ensayo personal, vamos a ver si entendemos qué nos pasó, viendo alguna solución, pensando en qué tipo de sociedades construyen las ciudades.
–La FIL tiene ahora su propia voz y su debate
-La FIL siempre se ha movido para expresar su voz, a través de los premios, de los invitados, nunca ha tenido una voz conservadora, pero ahora con el devenir de los tiempos, no se puede adoptar una postura neutra. Antes existían estos grandes ejes reguladores de la sociedad, el PRI, la Iglesia, que ahora no son lo más y creo que en una sociedad de pequeños nichos de cosmovisión, es importante asumir una actitud, propender a un debate y sobre ciertas bases progresistas.
–¿Va a haber algo sobre el sexo? Hace poco tiempo pensábamos que sólo existían dos géneros…
–Tanto ha cambiado que revistas como National Geographic, una revista tan mainstream como esa, acaba de dedicarle un número al sexo y a su transformación. Una mesa específica sobre el tema no habrá, pero sin duda estará reflejado en la mesa sobre Cultura, que estará Gilles Lipovetsky, Ana Elena Mallet, Néstor García Canclini, Ricardo Raphael.
–¿Cuáles son los puntos de partida?
–La llegada de Donald Trump a la presidencia de Estados Unidos y el triunfo de alas conservadoras en Europa, en medio de campañas elaboradas a partir de discursos de odio y bajo el uso de narrativas de segregación y exclusión, son el punto de partida del coloquio internacional Los acosos a la civilización. De muro a muro. Estamos ante el fin de una era marcada de manera simbólica por dos muros: el de Berlín, derribado en 1989, y el que hoy se pretende terminar de construir en la frontera entre Estados Unidos y México.
–¿Cuáles los desafíos?
–El coloquio surge con el propósito de hacer un diagnóstico y debatir acerca de las amenazas que representan las notables disrupciones que experimenta el panorama mundial. Se trata de tomar posición ante la voluntad de frontera y el incremento de la xenofobia, el racismo y la demagogia, para construir, desde la conciencia crítica, un frente que permita hallar soluciones y propuestas para superar esta afrenta que pone en peligro el desarrollo de una ciudadanía responsable y democrática.
Se trata, también, de una declaración de rechazo a todos los muros, tanto reales como metafóricos, que pretenden impedir el diálogo y la solidaridad entre seres humanos.