El Gobernador de Coahuila denunció que desde el inicio de su mandato ha recibido amenazas de muerte por parte de líder de Los Zetas, luego de que les declarara «la guerra». Pidió a quienes aspiran a gobernar Coahuila que tomen decisiones firmes para que la inseguridad no vuelva a las calles.
Por José Rodríguez
Ciudad de México, 25 de noviembre (SinEmbargo/Vanguardia).- Rubén Moreira Valdez, Gobernador de Coahuila, reveló que nunca imaginó el riesgo al que se enfrentaría al declarar la guerra a los cárteles de la droga que tenían bajo su control la entidad, mientras que hace pocas semanas, dos organizaciones delictivas, intentaron entrar a la entidad, pero no pudieron.
“¡No, no imaginé, y lo volvería hacer! […] Sí, claro, claro y que te amenacen de muerte, y que te traten de matar como lo han tratado de hacer, no es una justificación para no hacer nada, si estas en esto”, dijo el mandatario al referirse a las decisiones que ha tenido que tomar para enfrentar a la delincuencia organizada.
Dijo que a quienes aspiran a gobernar Coahuila, debe de tomar decisiones firmes para que la inseguridad no vuelva a las calles, porque seguro es que al día siguiente de que asuman el poder los van a amenazar.
“Al día siguiente los van a amenazar, al día siguiente los van a buscar, al día siguiente van a buscar a sus coordinadores de campaña, a sus directivos, a sus policías”, aseguró.
Destacó que Coahuila es un estado rico, porque en el país hay cinco entidades que sostienen el 50 por ciento de las exportaciones.
Respecto a si hay intentos de las organizaciones delictivas por intentar controlar territorio, aseguró que todos los días buscan ingresar.
“La semana pasada un cartel intentó, pero no pudo; y hace dos semanas, otro cartel intentó lo mismo, y no pudo”, dijo el mandatario.
Reveló que un diciembre, a principios de su mandato, cuando venía a un evento navideño le alertaron que entre el público había tres personas que intentarían matarlo, mientras que, en la mitad del año del 2012, le informó un Cónsul de Estados Unidos en México, para advertirle que los jefes del Cártel de los Zetas lo intentarían asesinar.
“Un diciembre que venía a Piedras Negras me dijeron que dentro del publico había tres gentes que me iban a matar. Y en la mitad del año del 2012, me hablo el cónsul americano, y me dijo: ¿Va a ir Usted a Piedras Negras?, le dije Sí; Vas a ir el viernes?, le dije, Sí. Tus camionetas son blancas, le dije Sí. Las van a sustituir, los 40 y 42 para matarte”, confió.