Familiares de víctimas de desaparición que emprendieron búsquedas ciudadanas en cerros de Iguala han hallado, en un año, más de 70 fosas clandestinas de las que la PGR ha exhumado, hasta ayer, 109 cuerpos, y con los dos que aún faltan por exhumar la cifra llegaría a 111, de los que la dependencia federal sólo ha identificado a 11 y entregado a ocho a sus familiares.
Ciudad de México, 25 de noviembre (SinEmbargo/El Sur).- Una fosa clandestina con cinco cuerpos sepultados fue hallada ayer por peritos y antropólogos de la Procuraduría General de la República (PGR) y familiares de víctimas de desaparición forzada del comité Los Otros Desaparecidos de Iguala en el ejido de Tijeritas, Guerrero, con los que el número de cuerpos recuperados estaría llegando a 111 en un año.
Una fuente de los familiares de las víctimas de desaparición forzada que acompaña a los peritos y antropólogos de la PGR en la exhumación de los cuerpos, confirmó que hasta las 19:20 horas de ayer continuaban los trabajos de exhumación y hasta ese momento habían recuperado tres de cinco cuerpos, con los que el número de restos recuperados en un año llegó a 109, y hoy alcanzaría 111.
La fosa en la que la PGR inició trabajos de exhumación ayer es la misma en la que familiares de víctimas de desaparición forzada del comité Los Otros Desaparecidos de Iguala habían localizado un cuerpo con los pies atados en la búsqueda del 8 de noviembre, y en la que habían advertido que habría más de un cuerpo sepultado.
Según información de la fuente, en la misma fosa, apilados uno sobre otro, fueron hallados cinco cuerpos, al parecer de hombres, y según lo que alcanzó a ver, todos tenían huellas de tortura, las manos y los pies atados y los ojos vendados.
La zona en la que PGR exhuma restos ubicados por familiares de desaparecidos, se ubica en un predio rústico del paraje Tijeritas, junto a un sembradío de maíz, al cual se llega a través de un camino de terracería, a unos 2 kilómetros de la carretera federal México-Acapulco, tramo Iguala-Taxco, unos 200 metros antes de la comunidad de El Naranjo, al norte de Iguala.
Del camino principal, el predio en el que se hacen las exhumaciones está sobre una brecha de herradura a unos 200 metros, a la cual sólo se llega caminando.
En un recorrido la tarde de ayer en el sitio de las exhumaciones, se confirmó que en la zona, desde unos 150 metros antes de llegar al punto en el que está la entrada al predio en el que se hallaron las fosas, unos 50 marinos en al menos ocho patrullas colocaron retenes a ambos lados de la carretera de terracería, e intentaron impedir que se sacaran fotografías del sitio.
Cerca de las 13:30 horas fue exhumado el primer cuerpo, de un hombre atado de pies y manos y con los ojos vendados, y para después de las 19:15 horas ya se había exhumado el tercer cuerpo.
Antes de esa hora, los peritos habían localizado sólo cuatro cuerpos, pero al continuar las excavaciones localizaron el quinto cuerpo, a cerca de un metro 80 centímetros de profundidad, y los familiares de desaparecidos no descartan que en esta misma fosa pueda haber más cuerpos inhumados.
Los trabajos de excavación y exhumación de los cadáveres se suspendieron alrededor de las 19:40 horas, y se espera que hoy la PGR continúe con las excavaciones y exhumaciones de los demás cuerpos.
En este mismo predio, ubicado por familiares de desaparecidos y un guía que los llevó hasta este punto en el que creen que hay al menos otras 30 posibles fosas, han sido hallados siete cuerpos y hasta ayer sólo cinco habían sido exhumados, en la que es considerada la segunda etapa de búsqueda de fosas clandestinas.
En un año desde noviembre de 2014, cuando surgió el comité Los Otros Desaparecidos, tras el caso Ayotzinapa, los familiares de víctimas de desaparición que emprendieron búsquedas ciudadanas en cerros de Iguala han hallado más de 70 fosas clandestinas de las que la PGR ha exhumado, hasta ayer, 109 cuerpos, y con los dos que aún faltan por exhumar la cifra llegaría a 111, de los que la dependencia federal sólo ha identificado a 11 y entregado a ocho a sus familiares.