Cada año en México son asesinados más de mil 800 millones de animales para consumo humano, los cuales pasan toda su vida confinados en granjas, siendo sometidos a prácticas atroces y crueles y cuyo destino final es el matadero.
Ciudad de México, 24 de julio (SinEmbargo).– “El Enemigo del Planeta”, una investigación realizada con drones por parte de la organización Igualdad Animal, reveló la catástrofe ambiental provocada por las granjas porcícolas de México.
“La ganadería industrial crece como una vorágine que arrasa todo a su paso, contaminando suelos y aguas, provocando gases de efecto invernadero que desatan fenómenos naturales catastróficos, es causante de enfermedades que terminan en pandemias y del mayor sufrimiento hacia los animales, es necesario frenar todos estos riesgos definitivamente”, señala Dulce Ramírez, Directora Ejecutiva Igualdad Animal México.
La ganadería industrial no reporta la cantidad de olores, gases, partículas sólidas y líquidas que emiten a la atmósfera, y además existen discrepancias en las declaraciones de su consumo de agua y manejo de residuos. Además de que no existe información alguna acerca de dónde están obteniendo este recurso, con qué permisos cuentan y quién está verificando cómo se están reportando y pagando, informó Igualdad Animal, organización fundada en el año 2006.
Igualdad Animal recordó que el agua es un recurso natural indispensable para la vida humana, “y para producir un kilo de carne de cerdo, se necesitan 12 mil litros de agua potable. En cifras nacionales, la crianza de cerdos para consumo humano, representa la utilización del 4por ciento de toda el agua potable renovable de nuestro país. Pero, además de gastar millones de litros de agua potable, esta industria la contamina. El mal manejo y la falta de tratamiento de las heces y orina de los animales es un importante factor de contaminación del suelo y del agua, y una fuente de enfermedades infecciosas para los humanos”.
La organización, que cuenta con sedes en países como España, Italia, México, Inglaterra y Venezuela, aseguró que “los estanques aledaños a las naves porcícolas llenos por la acumulación de excretas que producen gases de efecto invernadero, provenientes de la orina y las heces de los cerdos, son un caldo de cultivo perfecto de enfermedades pues se pueden encontrar más de 100 patógenos diferentes causantes de padecimientos en los humanos; tan solo en un gramo de excremento porcino pueden concentrarse hasta 100 millones de bacterias”.
“Se estima que 3 de cada 4 enfermedades infecciosas nuevas o emergentes en las personas provienen de los animales (Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades)”, agregó. Hoy el mundo combate a la COVID-19, enfermedad que pudo originarse en China.
De acuerdo con la organización, dichas granjas cuentan con permisos de autoridades para continuar con sus operaciones.
“Por si no fueran suficientes estos daños ambientales, las condiciones extremas en las que viven los animales en estas granjas intensivas para abaratar los costos de su crianza, los mantiene viviendo un horror”, lamentó Igualdad Animal.
La organización detalló que cada año en México se mata a más de mil 800 millones de animales para consumo humano, los cuales pasan toda su vida confinados en granjas, siendo sometidos a prácticas atroces y crueles y cuyo destino final es el matadero.
“Como parte de esta investigación, Igualdad Animal México presentó cuatro denuncias en contra de estas granjas, por hechos, actos y omisiones que pudiesen producir desequilibrio ecológico y daños al ambiente, para así solicitar su clausura definitiva, la revocación de los permisos, licencias y autorizaciones de operación, así como la reparación del daño”, expuso.
Igualdad Animal señaló que “es necesario frenar la operación de empresas como estas que sin el menor indicio de responsabilidad están lucrando con nuestra salud, los animales y el planeta”. Y exigió a las autoridades “que tomen acciones concretas para que la clausura de las granjas que cometen delitos contra el ambiente sea definitiva y reparen el daño”.