Los atrasos de la Fiscalía del Edomex son la pesadilla para las familias de Arlet Samantha Olguin, quien desapareció el 25 de abril, cuando iba por su hijo al kínder adonde nunca llegó; de Evelyn Rojas Matus, quien ya no volvió a su domicilio desde el 26 de julio después de salir a comprar ropa de paca; de Nancy Noemí Huitron Solorio, quien fue reportada como desaparecida el 6 de septiembre, y de María Guadalupe y su hija de 7 años, quienes fueron buscadas por su familia tras desaparecer misteriosamente en el mes de febrero de 2017.
Por Beda Peñaloza
Ecatepec, Estado de México, 24 de diciembre (A Fondo Edomex/SinEmbargo).- Audiencias canceladas, falta de interés de autoridades para culminar la entrega de pruebas que vinculen a procesos a la pareja de feminicidas y una eterna espera para que les entreguen los restos de los seres queridos que ya fueron identificados. “Como si se tratará de una burla”. Eso es lo que han tenido que soportar familiares de víctimas del feminicida de Ecatepec.
En el mes de noviembre, la Fiscalía General de Justicia del Estado de México dio a conocer que (gracias a los resultados de genética) los restos humanos encontrados en diferentes propiedades tras la detención de Juan Carlos “N” y su esposa Patricia “N”, pertenecían a ocho mujeres. Luego del anuncio, las madres de Arlet, Nancy, Evelyn, así como la familia de Maria Guadalupe y su hija, atraviesan otro martirio porque las autoridades no tienen fecha para la entrega de los hallazgos. Desconocen a que se deba. Viven más angustiadas.
La pareja de feminicidas sólo ha sido vinculada a proceso por los delitos de violación a las Leyes de Inhumación y Exhumación a los cadáveres, el de trata, privación de la libertad y sólo por un feminicidio, a consecuencia de la cancelación de audiencias.
La primera de ellas fue cancelada el pasado 12 de diciembre, debido a que la Fiscalía pidió un plazo para recabar pruebas. La audiencia se pospuso cinco días, es decir al 17 de este mes, pero por la falta de asistencia de los empleados de los Ministerios Públicos, que además dejaron plantadas a tres de las madres, se volvió a cancelar y se planteó una nueva agenda para la primer quincena de enero de 2019.
La cancelación causó la molestia de familiares de la víctimas, que se trasladaron a Toluca a reclamar, al considerar como una burla para quienes buscan justicia tras los feminicidios de sus hijas. Recordaron que ya han vivido un calvario buscándolas.
Ante la presión que hicieron a las autoridades, de urgencia ordenaron que la audiencia se realizara al siguiente día. Sin embargo los trabajadores de la Fiscalía pidieron al juez les otorgará tres meses de plazo para entregar las pruebas necesarias que vinculen a proceso a la pareja por los feminicidios que faltan.
Sin embargo, el Juez que lleva el caso no aceptó y solo dio de plazo hasta el 13 de enero del próximo año.
Familiares de las jóvenes madres que fueron asesinadas han denunciado la falta de interés de las autoridades, quienes a dos meses de la localización de los restos humanos todavía no tienen listas las pruebas contra la pareja de feminicidas de Ecatepec para presentarlas al juez. Esto ha traído como consecuencia que la pareja, recluida en el penal de Chiconautla, no sea procesada por los feminicidios que cometieron.
Después de vivir el tormento de la desaparición de sus familiares, ser minimizadas por las autoridades a las que pedían las buscarán, y quedar muertas en vida al enterarse de que sus niñas habían sido asesinadas, la madres no han podido dar cristiana sepultura a sus hijas, porque les informaron que aun no hay fecha de entrega de los restos humanos.
Las familias alertaron que se pretende olvidar y minimizar los casos.
Por estos atrasos y la apatía de personal de la fiscalía, la pesadilla continúa para las familias de Arlet Samantha Olguin, que desapareció el 25 de abril, cuando iba por su hijo al kínder a donde nunca llegó; de Evelyn Rojas Matus, quien ya no volvió a su domicilio desde el 26 de julio después de salir a comprar ropa de paca y de Nancy Noemí Huitron Solorio, que fue reportada como desaparecida el 6 de septiembre.
Ademas de María Guadalupe y su hija de 7 años, que fueron buscadas por su familia tras desaparecer misteriosamente en el mes de febrero de 2017 y que también se confirmó fueron encontradas entre los restos humanos que tampoco les han entregado.
La vida de todas estas familias fue destrozada desde que las jóvenes madres desaparecieron. Mientras la pareja de feminicidas tiene un semblante normal y se encuentran bien dentro del Reclusorio, las madres de las víctimas han enfrentado problemas de salud y los cuales aumentan al no saber cuál es la causa que detiene a las autoridades a entregarles los restos de sus hijas.