Terry, que ha retratado a Obama, Madonna, Clint Eastwood o a Marilyn Manson, ha logrado eludir de un modo u otro y hasta el momento las acusaciones de abusos sexuales que le rodean desde hace más de un lustro.
Ciudad de México, 24 de octubre (AS México/SinEmbargo).- La salida a la luz de las acusaciones de abusos sexuales vertidas sobre el productor de Hollywood Harvey Weinstein están haciendo cambiar algo. La escalada de testimonios y confesiones de aquellos que trabajaron junto a él han provocado un terremoto que se ha trasladado de la meca del cine a otros ámbitos y que ha acabado por llegar a la moda. El siguiente nombre en la lista es el de Terry Richardson.
El fotógrafo estadounidense, considerado una de las estrellas tras una cámara que ha retratado a Obama, Madonna, Clint Eastwood o a Marilyn Manson , ha sido vetado por las publicaciones del grupo Condé Nast Internacional, tal y como explicó el diario británico The Telegraph. Revistas como Vogue, Vanity Fair o GQ no publicarán el trabajo de Richardson a partir de ahora.
Apodado por The Times como «el Harvey Weinstein de la moda», Richardson ha logrado eludir de un modo u otro y hasta el momento las acusaciones de abusos sexuales que le rodean desde hace más de un lustro. El fotógrafo de 52 años acumula decenas de testimonios en su contra tanto de jóvenes modelos como de otros rostros más reconocidos de la industria. Su carrera no se había resentido hasta ahora.
SU DEFENSA EN 2014
La última gran escalada de acusaciones que Richardson vivió sucedió en 2014. En aquel entonces, el fotógrafo nacido en Nueva York acabó publicando un artículo en el New York Post en el que calificaba todas las acusaciones en su contra de «historias falsas y llenas de odio», y asegurando que se trataba de una caza de brujas visceral contra él.