Bogotá, 24 sep (EFE).- La crisis fronteriza con Venezuela retrasó el inicio de las negociaciones de paz entre el Gobierno de Colombia y la guerrilla del ELN, que espera un acuerdo del Presidente Juan Manuel Santos y su homólogo Nicolás Maduro, dijeron hoy fuentes cercanas al proceso.
Así lo expresó hoy a Efe el analista León Valencia, de la Fundación Paz y Reconciliación, especializada en el conflicto armado, al indicar que la crisis ha retrasado el anuncio «unos pocos días», pero que confía en que se establezca una fecha «en estas próximas semanas».
«Ellos (el ELN) tenían un acuerdo ya de agenda, de metodología de negociación, y en la ultima reunión, entiendo, quedaron en que una vez que se reúnan Maduro y Santos se sentarían para acordar la fecha de anuncio de las negociaciones del ELN y el Gobierno», afirmó.
Según Valencia, ex guerrillero del Ejército de Liberación Nacional (ELN), ese grupo armado quería esperar a la reconciliación de ambos mandatarios «por una consideración política», ya que «pensaba que era un desplante a Maduro iniciar las negociaciones antes de que se reunieran Santos y él».
El Gobierno y el ELN están desde enero de 2014 en diálogos exploratorios para abrir un proceso de paz similar al que celebra en Cuba con las FARC, pero en este caso los contactos se han producido en Ecuador.
El jefe máximo del ELN, Nicolás Rodríguez Bautista, alias «Gabino», dijo el pasado 9 de septiembre en una entrevista que falta acordar solo «el tres por ciento» de la agenda para iniciar unas negociaciones de paz.
No obstante, el anuncio no se retrasará demasiado puesto que, a juicio del analista, el acuerdo de justicia transicional alcanzado ayer entre el Gobierno y las FARC en La Habana «sin duda» añade presión al ELN, ya que esa guerrilla quiere confluir con el proceso de paz de Cuba, que terminará en un plazo máximo de seis meses.
Valencia considera que el acuerdo de justicia con las FARC «allana el camino para acuerdos con el ELN», puesto que puede adherirse a él y así dar por zanjado uno de los aspectos de sus diálogos de paz.
«Los habilita para concentrarse en otros tipos de negociación, como el tema minero-energético, que le interesa al ELN, o en el tema de frontera, y no tenga que discutir todo lo que han discutido las FARC. Si son sensatos los del ELN, al contrario, esto les podría acelerar el proceso de paz», comentó.
Para el analista, el acuerdo de Cuba es «bueno» porque evita la amnistía general que buscaban las FARC, repara a las víctimas y al mismo tiempo permite a la guerrilla «responder a la justicia y hacer política, que ha sido su objetivo durante 50 años».
Santos y Maduro abordaron por primera vez en persona la crisis fronteriza el pasado lunes en Quito, donde mantuvieron un encuentro auspiciado por la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) y la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac).
Allí acordaron que se celebrarán ulteriores encuentros ministeriales para normalizar la situación en la zona limítrofe, cerrada por orden del Presidente venezolano desde hace más de un mes para, argumentó, reforzar la lucha contra el contrabando y presuntos paramilitares. EFE