La menor de 13 años recibió la vacuna Pfizer el pasado sábado en Mexicali, Baja California.
Ciudad de México, 23 de agosto (SinEmbargo).– Ingrid Nattalie, de 13 años, fue vacunada contra la COVID-19 con la vacuna Pfizer en Mexicali, luego de un amparo que interpusieron sus padres desde el 16 de agosto ante el Juzgado Primero de Distrito con sede en Baja California.
El video de la menor recibiendo la vacuna el pasado sábado fue transmitido la noche del lunes en el noticiero de Ciro Gómez Leyva en Imagen Noticias.
Ingrid Nattalie de 13 años ya fue vacunada contra el #COVID19 con la vacuna de #Pfizer en #Mexicali gracias a un amparo que interpusieron sus padres desde el 16 de agosto ante el Juzgado Primero de Distrito con sede en #BajaCalifornia: pic.twitter.com/B2gP8z6Q0A
— Ciro Gómez Leyva (@CiroGomezL) August 24, 2021
En los últimos meses se han reportado casos de padres de familia que acuden ante un juez para que sus hijos menores de 18 años reciban la vacuna anticovid por considerar que su derecho a la salud está sobre las reglas de la Política Nacional de Vacunación, la cual no permite vacunar a menores por el momento.
Al menos 15 amparos han sido concedidos en la Ciudad de México, Estado de México, San Luis Potosí, Oaxaca y Querétaro para que menores reciban la vacuna contra la COVID.
El 24 de junio la Comisión Federal de Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) autorizó el uso de emergencia de la vacuna de Pfizer-BioNtech para el sector de menores de 12 a 17 años. Sin embargo, el Gobierno no planea de manera inmediata inocular a los niños.
El inminente inicio del ciclo escolar ha dado pauta a un debate en el que, por un lado, algunos padres y profesores han cuestionado la falta de condiciones sanitarias para el regreso presencial, mientras que por el otro lado, las autoridades educativas y el Presidente Andrés Manuel López Obrador han manifestado la urgencia del retorno a las aulas para atender el rezago y el abandono escolar, situaciones que se han exacerbado durante la actual pandemia.
En medio de este dilema se encuentran los menores de edad, quienes —a diferencia de los adultos de todas las edades— no han sido vacunados contra la COVID-19 ni están considerados en el plano inmediato para ser inmunizados. Además, ellos tendrán que enfrentar a futuro las consecuencias de las deficiencias de la educación a distancia en la que se desarrolló el pasado curso.
En el caso de un retorno presencial, la seguridad de los más pequeños estará sujeta al control que se establezca en los hogares, pero además a la infraestructura de los planteles, la cual tiene carencias de tiempo atrás. Un ejemplo de ello es que sólo el 51.6 por ciento de las escuelas públicas de nivel básico cuenta con drenaje, el 69 por ciento con agua potable y el 87.2 por ciento con sanitarios, según los datos del Censo de Escuelas, Maestros y Alumnos de Educación Básica y Especial (CEMABE) 2014, que son los más recientes que existen.
A todo ello se suma otro factor: el número de contagios entre menores de edad. De acuerdo con datos de la Secretaría de Salud, los casos de niñas, niños y adolescentes con resultado positivo de SARS-CoV-2 pasaron de 84 a 60 mil 928 del 12 de abril de 2020 al 08 de agosto de 2021, el último corte reportado por el Sistema Nacional de Protección de Niñas, Niños y Adolescentes (SIPINNA).