Debido a las discrepancias y aclaraciones que surgieron tras la publicación del Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2019, la ASF informó que será un equipo de auditoría independiente a la Dirección de Auditoría de Desempeño a Gobierno y Desarrollo Económico, así como del y al Comité de Integridad Institucional, el que examine el apartado 1394-DS.
Ciudad de México, 24 de febrero (SinEmbargo).- Un equipo de auditores externos revisará el reporte que la Auditoría Superior de la Federación (ASF) emitió el fin de semana que estimó que la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) costó 331 mil 996.5 millones de pesos. El grupo realizará una observación independiente a la emitida por la institución.
La ASF informó en su cuenta de Twitter que se trata de un equipo de auditoría independiente a la Dirección de Auditoría de Desempeño a Gobierno y Desarrollo Económico, a cargo de Ricardo Flores Martínez, y al Comité de Integridad Institucional, que tiene como finalidad prevenir, identificar, atender y dar seguimiento a posibles conductas contrarias a la Política de Integridad de la Auditoría, además de dirimir posibles conflictos de interés.
El grupo examinará el apartado 1394-DS del Informe del Resultado de la Fiscalización Superior de la Cuenta Pública 2019, que estimó lo que costó la cancelación del NAIM que se proyectaba en Texcoco, cifra que ubicó en 331 mil millones de pesos, es decir, un 232 por ciento más que el monto inicial estimado.
así como su proceso, para hacer las aclaraciones pertinentes en relación con los costos presentes y futuros de la realización del NAICM.
— Auditoría Superior (@ASF_Mexico) February 24, 2021
Los auditores también revisarán el proceso de desarrollo de la primera investigación y buscarán «hacer las aclaraciones pertinentes en relación con los costos presentes y futuros de la realización del NAICM».
La ASF reiteró su compromiso con «la rendición de cuentas, el profesionalismo y la excelencia en la fiscalización superior», además de ratificar que su labor debe apegarse a principios constitucionales de fiscalización e integridad institucional.
LA ASF SE DESDICE
Unas horas bastaron para que la ASF saliera a señalar que hubo inconsistencias en el Informe de la Cuenta Pública de 2019, en específico en sus estimaciones sobre lo que costó la cancelación del NAIM. La fe de erratas vino después de que el Presidente Andrés Manuel López Obrador saliera a desestimar los cálculos.
Lejos de ser la única inconsistencia, el Auditor Superior de la Federación, David Colmenares, salió a aclarar —antes de que reconociera su imprecisión con el costo de la cancelación del aeropuerto— otro de los hallazgos que generaron polémica en la fiscalización de la cuenta pública: la negativa de la Secretaría de la Función Pública (SFP), que encabeza Irma Eréndira Sandoval, a ser fiscalizada.
El informe de la Auditoría contiene un aluvión de observaciones hacia esta dependencia por un supuesto funcionamiento deficiente que pudo ser determinante para no llevar a buen puerto sus tareas de control interno en el Gobierno federal, a lo cual se sumó la denuncia de que hubo obstáculos para que el equipo auditor llevara a cabo sus labores.
La Función Pública aclaró en un principio que la ASF no emitió ninguna promoción de responsabilidades administrativas sancionatorias, ni ninguna solicitud de aclaración hacia esta dependencia. “Lo único que recibimos… fueron recomendaciones para fortalecer el control interno, las cuales tomaremos en cuenta con total responsabilidad a fin de alcanzar mejoras en la operación”, expresó.
Posteriormente, fue el propio Auditor Superior quien —en medio de la polémica por lo contenido en el informe— salió a matizar en una entrevista con Radio Fórmula que en realidad no hubo obstáculos y que incluso en la SFP “trabajaron bien” con el equipo auditor.
-Con información de Obed Abraham Rosas Gámez