El director de la Casa del Migrante, el padre italiano Mauro Verzeletti, denunció este martes que las autoridades de Guatemala mantienen los retenes «sin atención y deshidratados a los migrantes, sobre todo a los niños», quienes junto a sus padres y demás personas de las caravanas llegan al albergue «hechos trizas» para ser atendidos por los médicos.
Zacapa (Guatemala), 23 de octubre (EFE).- Una nueva caravana de migrantes de hondureños, unos mil 500 de acuerdo con la Procuraduría de Derechos Humanos de Guatemala, atraviesa hoy el territorio guatemalteco.
El grupo, entre el que sigue habiendo niños, se dirige hacia la cabecera departamental de Zacapa, donde se prevé que pasen la noche de este martes antes de continuar su travesía para poder llegar a Estados Unidos, como intentan unos compatriotas que ahora están en México.
Durante el camino, la Policía Nacional Civil de Guatemala está realizando retenes y los toman de los vehículos donde estén montados, como camiones o tráileres.
El director de la Casa del Migrante, el padre italiano Mauro Verzeletti, denunció este martes que las autoridades mantienen los retenes «sin atención y deshidratados a los migrantes, sobre todo a los niños», quienes junto a sus padres y demás personas de las caravanas llegan al albergue «hechos trizas» para ser atendidos por los médicos.
Afirmó que los agentes de la Policía Nacional de Guatemala están «extorsionando» a los migrantes, a quienes «les cobran en cada retén 100 quetzales (cerca de 13 dólares)» y que si hay tres retenes, entonces «son tres pagos los que suelen hacer las personas».
La nueva caravana de migrantes, en su mayoría hondureños, llegó este lunes a Chiquimula tras un diálogo con agentes de la Policía Nacional Civil, el Ejército y personal de la Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres, que los trataron de disuadir.
Pero los migrantes, que habían pasado la frontera de Agua Caliente, Honduras, consiguieron eludir el retén tras dialogar con las autoridades, según indicó la titular de Comunicación Social de la Procuraduría de los Derechos Humanos de Guatemala, Lesvia Salguero.
Los migrantes siguieron la marcha por la ruta con el fin de cruzar el territorio guatemalteco (unos 250 kilómetros a lo ancho) y llegar a la frontera con México, para continuar hacia su destino: Estados Unidos.
Al menos 7 mil personas, según la ONU, forman parte de la primera caravana de migrantes centroamericanos que desde el pasado 13 de octubre avanza rumbo a Estados Unidos.
MÁS DE 7 MIL MIGRANTES SE REGISTRAN EL FIN DE SEMANA
El refugio para migrantes del municipio de Suchiate, estado mexicano de Chiapas, fronterizo con Guatemala, registró a siete mil 125 personas de la caravana que entró a territorio nacional durante el fin semana, informó a EFE un funcionario local.
El director de atención a personas migrantes y refugiados de Suchiate, Sergio Seis Cabrera, dijo que el arribo de los hondureños «sobrepasó los límites de atención», pero a pesar de ello se les apoyó en lo necesario.
«Nosotros registramos siete mil 125 personas», dijo el responsable, quien estimó que registraron mil 500 mujeres, mil 500 niñas y 900 niños, así como unos dos mil miembros de comunidades LGBTI.
Señaló que por el momento el municipio se encuentra en «calma», pero está en «alerta preventiva» ante el aviso sobre el posible arribo de otra caravana de unos dos mil hondureños que salieron este fin de semana rumbo a frontera México-Guatemala. «Estamos prevenidos para atender esa posible contingencia», apuntó Cabrera.
Comentó que tiene reportes de que todavía hay migrantes en el puente fronterizo que cruza el Río Suchiate. «La única opción que les queda, ya que no tienen comida y no les están suministrando, es mejor llevar su proceso de manera legal y lo están trasladando a la ciudad de Tapachula, al Instituto Nacional de Migración», expuso.
Este lunes el grueso del contingente de migrantes que ingresaron a territorio mexicano partió de Tapachula hacia Huixtla, a unos 35 kilómetros.
La caravana salió el 13 de octubre de San Pedro Sula (Honduras) con al menos unas cinco mil personas.