Según el pronóstico del Centro Nacional de Huracanes (NHC), la tormenta tropical “Gonzalo” puede convertirse en un huracán durante este jueves; de serlo, sería el primer fenómeno de este tipo de la temporada en el Océano Atlántico.
Miami, Estados Unidos, 23 de julio (EFE).- La tormenta tropical «Gonzalo» puede transformarse en huracán a lo largo de este jueves, lo que lo convertiría en el primer ciclón de estas características de la temporada en la cuenca atlántica, según pronosticó el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de Estados Unidos.
El boletín de las 08:00 (12:00 GTM) indicó que el centro de la tormenta se encontraba a 910 millas (mil 470 kilómetros) al sur de las Islas de Barlovento, en las Antillas Menores, y le acompañan unos vientos sostenidos de 65 millas por hora (100 kilómetros por hora).
«Gonzalo» continúa desplazándose hacia el oeste a una velocidad de 12 millas por hora (19 kilómetros por hora), lo cual ha llevado a gobiernos como el de Barbados a emitir una alerta por huracán.
El NHC prevé que la tormenta aumente de velocidad y de fuerza durante los próximos días y que a partir del sábado se vaya desplazando hacia el noroeste hasta que el centro se posicione sobre las Islas de Barlovento dejando a su paso acumulaciones de agua de hasta 7 pulgadas (17 centímetros) en esta región.
Estas precipitaciones podrían desembocar en inundaciones en Barbados y las Islas de Barlovento, aunque todavía se mantiene una alto «grado de incertidumbre» en cuanto a la evolución de la tormenta durante los próximos tres días conforme se acerca al Mar del Caribe.
El NHC, con sede en Miami, también advirtió de la formación de la depresión tropical Ocho en el Golfo de México que se localiza a unas 405 millas (650 kilómetros) al sureste de Port O’Connor (Texas) y que se está desplazando hacia el noroeste con fuertes vientos.
Según su movimiento actual, se espera que la depresión llegue a la costa tejana a lo largo del viernes y se podría convertir en tormenta tropical durante las próximas veinticuatro horas aproximadamente.
Este año ya se formaron las tormentas «Arthur» y «Bertha», antes del inicio oficial de la temporada de huracanes, que comienza el 1 de junio y va hasta el 30 de noviembre, a las que le siguieron «Cristóbal», «Dolly», «Edouard» y «Fay».
Los expertos pronostican para la temporada una actividad ciclónica «por encima de lo normal».
La intensidad de «Gonzalo» ya se asemeja a la de un huracán y está cerca de producir vientos de 119 km/h, una de las características necesarias para que entrase en este categoría.
Una temporada normal tiene 12 tormentas con nombre, de las cuales 6 se convierten en huracanes, incluidos 3 de categoría mayor, es decir 3, 4 o 5 (la máxima) en la escala de Saffir-Simpson.
Según la Administración Nacional Oceánica y Atmosférica (NOAA, en inglés), la actual temporada ciclónica tendrá de 13 a 19 tormentas con nombre (con vientos de 65 kilómetros por hora), de las cuales de 6 a 10 podrían convertirse en huracanes.
De esos huracanes, de 3 a 6 podrían llegar a ser mayores, es decir con vientos máximos sostenidos de 178 km/h o más.