Ciudad de México, 23 de julio (SinEmbargo).– Agricultores, productores, consumidores y organizaciones de la sociedad civil, que defienden los derechos humanos y la alimentación, se manifiestan por una regulación del uso de agua y una Reforma al Campo que garantice la producción agrícola, que con la Reforma Energética, pretende la expropiación de los principales mantos acuíferos que se utilizan para los cultivos que alimentan al país.
Hoy, diversos grupos civiles realizarán una marcha que partirá a las 11:00 horas del Ángel de la Independencia y de la Estela Luz, rumbo a la Secretaría de Gobernación (Segob), para después dirigirse, divididos en distintos contingentes, a la Presidencia de la República, en Chapultepec, y al Senado, en avenida Paseo de la Reforma.
Posteriormente, a las 16:00 horas, una segunda marcha partirá de la Segob hacia el Zócalo capitalino con la misma bandera: exigir mejores condiciones para los trabajadores agrícolas.
Uriel Vargas, integrante de la Unión Nacional de Productores Agropecuarios, Comerciantes, Industriales y Prestadores de Servicios, El Barzón, precisó que la movilización tiene como objetivo “impulsar una reforma al campo luego de que al inicio de la administración del Presidente Enrique Peña Nieto, se reconociera que más de 25 millones de personas viven en pobreza alimentaria”.
“Lo que estamos exigiendo es una verdadera reforma para el campo, porque el Ejecutivo no ha propuesto nada. Ya hay una contra reforma al campo, que está implícita en las afectaciones a la actividad agrícola y agropecuaria que se instauran en la Reforma Energética”, agregó.
En ese sentido, El Barzón Nacional manifestó: “Venimos a detener el despojo de las tierras y a defender el agua. Venimos a detener una Reforma Energética que pretende expropiar millones de hectáreas a favor de las corporaciones petroleras que hoy buscan apoderarse de los acuíferos que se usan en la producción de alimentos, lo que reducirá la superficie agrícola”.
Las más de 30 organizaciones del sector rural que se unieron a la protesta de los trabajadores agrícolas pretenden “alcanzar una reforma que garantice la producción de alimentos a partir de la propia producción nacional , que es lo que han olvidado las reformas estructurales”, explicó Vargas.
El integrante de El Barzón comentó que el 6 de marzo pasado, el Enrique Peña Nieto se comprometió a impulsar una Reforma al Campo, sin embargo, hasta la fecha, el mandatario no ha presentado una propuesta, por ello, tras una serie de movilizaciones y en el marco del aniversario de la Ley Agraria, organizaciones sociales y el gobierno federal llegaron un acuerdo para la realización de foros que comenzaron desde el 7 de mayo de este año a difundir información en materia agropecuaria.
“Como resultado de los foros, se instaló hace una semana, la mesa de redacción de lo que se tratará la reforma del campo, la cual, está integrada por especialistas y académicos, para recabar opiniones de las Comisiones de Agricultura, organizaciones, y diputados, para generar la propuesta de Reforma para el Campo y se discuta en el próximo periodo de sesiones”, explicó.
Además, lo trabajadores agrícolas detallaron que a la lista de inconformidades se suma “el aumento en el costo de los insumos a partir del incremento de los precios y de las tarifas de energía eléctrica para riego agrícola, de fertilizantes, de gasolinas y diesel”, aseguraron.
EXPLOTACIÓN DEL AGUA
La Unión Nacional de Productores Agropecuarios precisó además que el sector alimentario utiliza el 70 por ciento del agua disponible en el país para la producción de alimentos, pero sólo aprovecha el 30 por ciento “el resto se desperdicia por la falta de prácticas y métodos sustentables”, precisó El Barzón.
Aunado al poco aprovechamiento del agua, la Ley de la Industria Eléctrica establece la forma en que las empresas privadas podrán hacer uso de la toda la infraestructura para el aprovechamiento de la energía eléctrica, lo que amenaza el abastecimiento del líquido para las actividades agrícolas.
Además, en México, 101 de los 182 acuíferos más importantes del país se encuentran sobreexplotados y 40 millones de personas dependen de dichos mantos para tener siquiera acceso al agua, destacó la agrupación.
Por lo anterior, los trabajadores del campo demandaron una mejora en las técnicas de riego para cumplir la meta de 1.5 millones de hectáreas en 2018.
También exigieron que se cumpla con la medición obligatoria de volúmenes de agua consumidos, así como determinar la superficie de riego con base al volumen concesionado para la reducción en la extracción del agua.
“Para que exista un uso eficiente del agua del sector agropecuario debe existir un programa de obras y conservación de agua y suelo a nivel nacional”, que podría no garantizarse con la exploración y explotación para la extracción de los hidrocarburos, explicaron los defensores de la tierra.
Integrantes del Barzón precisaron que la agricultura de riego genera el 40 por ciento de la producción agrícola nacional.
EL DERECHO A LA ALIMENTACIÓN
Otra de las demandas de los trabajadores agrícolas es garantizar el derecho a la alimentación ya que organismos como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO, por sus siglas en Inglés), así como la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económicos (OCDE) dieron a conocer el año pasado que la agricultura mundial enfrentará el reto de producir el 50 por ciento de alimentos para el año 2030.
“La propia FAO advirtió que el país que no produzca el 70 por ciento de sus alimentos está condenado a padecer crisis de hambre muy severas”.
Al respecto, Uriel Vargas aseguró que México está importando cerca del 50 por ciento de lo que consumimos en el país, no somos autosuficientes en muchos de nuestros alimentos” y agregó que con la Reforma Energética no se prioriza la producción del campo, lo que coadyuva a la dependencia de los alimentos del extranjero y al mismo tiempo que los precios de los productos sean altos.
En ese sentido, El Poder del Consumidor expresó, la semana pasada, “los consumidores demandamos disponibilidad y acceso a alimentos nutritivos a precios justos como condición indispensable para combatir la epidemia de obesidad y diabetes que afecta a más del 70 por ciento de la población adulta y causa la muerte de más de 80 mil personas y la amputación de miembros en más de 75 mil al año”. Por ello, la organización exigió el pago justo a los productores como una condición fundamental para la mejora de la productividad agropecuaria.
“Hemos decidido trasladarnos a la Ciudad de México, ante el desplome de los ingresos del productor de granos básicos, del café y de la leche. Queremos reordenar el mercado agroalimentario, poner punto final al abuso de las empresas acopiadoras y comercializadoras, así como reducir los elevados márgenes de ganancia en la intermediación. Esos márgenes sólo benefician a un reducido grupo de empresas oligopólicas que explotan el mercado de los alimentos”, agregaron los productores.
DESPOJO DE LA TIERRA
Por otra parte, los agricultores se manifiestan por que se ponga un alto al despojo de tierras que trae consigo la Ley de Hidrocarburos, que en su Artículo 91 establece que “la industria de hidrocarburos es de utilidad pública y que la exploración y extracción de estos recursos es de interés social y de orden público”.
Asimismo, el artículo 96 dice que “ la contraprestación deberá ser proporcional a las necesidades del asignatario o contratista”, es decir, que las empresas nacionales y extranjeras que quieran explorar o explotar recursos naturales.
Al respecto, Uriel Vargas comentó que con las manifestaciones de los trabajadores del sector agropecuario “ se trata de detener el despojo que se está llevando acabo en el sector rural con las modificaciones de la Reforma Energética, que significan que sin importar que se hable de la producción , o que genere economía o empleos, ante la pura intención de un empresario de la industria petrolear de buscar un terrero todas las actividades quedan supeditadas.
Finalmente reiteró que las organizaciones de derechos humanos, de los defensores del campo y consumidores, hacen un llamado al Congreso, a la Presidencia, que no vamos a permitir un despojo de la tierras para que se lleven acabo actividades que beneficien sólo a unas cuantas empresas, se va a desatar un mercado muy voraz