Se trata de dos hermanos, ambos originarios de Bruselas y previamente fichados por la policía por cometer actos vandálicos, y de un individuo que se supone participó, además, en los atentados de París acaecidos el 13 de noviembre del año pasado.
Bruselas, 23 de marzo (SinEmbargo/EFE).- Autoridades belgas han logrado identificar a quienes se especula fueron los autores materiales del atentado terrorista en el aeropuerto de la ciudad de Bruselas, Bélgica.
Según la televisión pública francófona RTBF, dos de ellos, los hermanos Jalid y Brahim El Bakraui, ya habían sido fichados por actos de vandalismo, pero no por terrorismo. En cambio, el tercer sospechoso, que continúa prófugo de la ley, ha sido identificado como Najim Laachraui, informaron hoy el diario La Derniére Heure y la cadena de televisión RTL.
Hasta el momento se sabe que uno de ellos, Jalid, había alquilado bajo una falsa identidad la vivienda de la calle du Dries en el barrio bruselense de Forest, donde el pasado 15 de marzo tuvo lugar un tiroteo en el que uno de los sospechosos murió y otros dos huyeron, entre ellos supuestamente Salah Abdeslam, implicado en los atentados de París y que fue detenido posteriormente.
En cuanto al tercer sospechoso se refiere, originalmente medios locales habrían anunciado su detención el día de hoy en el distrito de Bruselas de Anderlecht por fuerzas especiales de la policía belga. Sin embargo, el hombre detenido no es el supuesto tercer miembro del comando que ayer atentó contra el aeropuerto de la capital belga.
La cadena de televisión RTL, que a media mañana había dicho que la persona arrestada en Anderlecht era Najim Laachraui, desmintió la información menos de dos horas después, sin precisar su identidad.
Además, RTL señaló que, en cualquier caso, la operación llevada a cabo esta mañana estuvo relacionada con los atentados de ayer en el aeropuerto y en la estación de metro de Maelbeek, donde hubo una veintena de muertos.
Según informaciones de los medios de comunicación, no confirmadas oficialmente, Laachraui es el hombre que aparece en la foto junto los que se cree que son dos terroristas suicidas arrastrando unos carros con equipajes, tomada por las cámaras del aeropuerto momentos antes de que se produjeran dos deflagraciones.
De acuerdo con esto y con la finalidad de capturar al terrorista prófugo, las fuerzas del orden habrían emitido una orden de busca y captura contra él y habían pedido a la población que diera todas las informaciones que pudiera tener sobre este hombre.
En su búsqueda se llevaron a cabo interrogatorios y registros, en particular en el distrito bruselense de Schaerbeek, donde ayer por la tarde se encontró un artefacto explosivo confeccionado en particular con tornillos, productos químicos y una bandera del Estado Islámico (EI).
De Laachraui no sólo se sospecha que estuvo directamente implicado en los atentados de ayer, sino también en la red que llevó a cabo los que se produjeron en París el pasado 13 de noviembre, y que mataron a 130 personas.
Su ADN se encontró en el material explosivo utilizado en la capital francesa. Los servicios secretos lo tenían en su punto de mira, en particular porque tenían constancia de que había ido a Siria en febrero de 2013.
En septiembre pasado fue objeto de un control, en la frontera entre Austria y Hungría en el que dio una identidad falsa -Sufiane Kayal-.
Iba entonces acompañado de dos presuntos miembros de la red que atentó en París: el francés Salah Abdeslam, arrestado el viernes pasado en Bruselas y el argelino Mohamed Belkaïd, abatido por la policía tres días antes también en la capital belga.
Laachraui tiene 24 años y nacionalidad belga. Procede del barrio Schaerbeek y se le relaciona con las redes yihadistas en otro sumario en el que la justicia belga debe dictar sentencia el próximo mes de mayo.
La Fiscalía pidió en febrero 15 años de prisión contra él por haber reclutado a varios de sus amigos para el Estado Islámico (EI).
LO QUE SE SABE AL MOMENTO
Los presuntos autores de los atentados en el aeropuerto de Bruselas transportaban los artefactos explosivos en maletas que pusieron encima de un carro de equipaje del aeropuerto bruselense de Zaventem, según informó La Dernière Heure.
El periódico cita al alcalde de Zaventem, Francis Vermeiren, quien dijo que los tres presuntos atacantes del aeropuerto llegaron en taxi con maletas y dentro «estaban las bombas».
Según la misma fuente, depositaron sus maletas en un carrito y las dos primeras bombas explotaron.
La tercera bomba, según Vermeiren, fue puesta en una bolsa de viaje encima del carrito, pero al presunto terrorista «le debió de entrar el pánico, porque no explotó».
El plan original de estos hombres, que habían pedido un coche grande, indican los medios belgas, era viajar con cinco maletas a Zaventem y se enfadaron cuando llegó uno pequeño, en el que no cabían cinco maletas, según el relato del taxista.
Ello hace pensar que su intención era poner más carga explosiva en el aeropuerto de la que finalmente fueron capaces de llevar.
Después del ataque el taxista recordó a los tres sospechosos y llamó a la Policía, por lo que fue él quien llevó a las fuerzas de seguridad a la dirección en la que les había recogido en el distrito de Schaerbeek.
Al taxista le extrañaba que los hombres no le dejaran ayudarles con las maletas, en cuyo interior estaba el material explosivo, según varias fuentes.
En la vivienda se encontraron un artefacto explosivo, productos químicos y una bandera del grupo terrorista Estado Islámico (EI), según informó la Fiscalía federal de Bélgica en un comunicado.
LAS NUEVAS PISTAS
Al menos tres coches han servido a los presuntos terroristas de Bruselas para cometer el martes el doble atentado en la capital belga: un taxi, un Renault Clio y un Audi S4 negro, informó hoy el diario belga La Libre Belgique.
Según el diario, la pista conduce a una persona de Limburgo, en la provincia de Lieja, que solo tiene 22 años y que ya estuvo bajo observación de los servicios de inteligencia el año pasado.
El propietario del Audi S4 visto en Zaventem pertenece a la comunidad turca y es conocido por los servicios belgas por haberse ido el año pasado a Arabia Saudí, de acuerdo con La Libre.
Identificado solo con la sigla A, viajó allí junto con tres otras personas de Limburgo, de 22, 25 y 26 años, y de un hombre de Amberes de 33 años, de origen marroquí.
Los datos del Audi fueron trasladados rápidamente, al igual que los de un Renault Clio, a las autoridades en las fronteras francesa y luxemburguesa, así como alemana y holandesa, indica el diario.
Las personas que estaban dentro del Audi no se bajaron en el aeropuerto, donde hubo dos explosiones, sino que se volvieron a Bruselas, según la misma fuente.
El diario se pregunta si se trata del segundo equipo de kamikazes, el que fue trasladado a Woluwe-Saint-Lambert, uno de los municipios de la Región Bruselas-Capital, dedicado a acometer el segundo atentado en el metro de Maelbeek.
El tercer coche empleado por los presuntos terroristas era un taxi, que llevó a los tres sospechosos de haber cometido el atentado en el aeropuerto a Zaventem.
HALLAN MENSAJES LIGADOS AL EI
Las fuerzas de seguridad belgas han encontrado tras los atentados del 22-M en Bruselas un ordenador que contiene mensajes ligados al Estado Islámico (EI), señaló hoy el diario belga La Libre Belgique.
La policía local de Bruselas ha entregado de urgencia el ordenador a las unidades antiterroristas de la Policía Judicial Federal de Bruselas tras haberle sometido al análisis de la brigada canina, añadió la fuente.
De momento se desconoce el contenido exacto del ordenador, pero el diario asegura que contendría «mensajes importantes ligados a la organización terrorista Estado Islámico (EI)».
También dice sobre el doble atentado de Bruselas, uno en el aeropuerto internacional de Zaventem y otro en la estación de metro de Maelbeek, que se desconoce aún si este segundo ataque fue perpetrado por un kamikaze o más bien con una bomba.
La información judicial ha sido abierta por la Fiscalía federal y un juez de instrucción ha sido nombrado para llevar a cabo la investigación del doble atentado, en el que fallecieron al menos 34 personas y cerca de 260 resultaron heridas, los peores ataques perpetrados en territorio belga.