El migrante fue atacado por personal de la Patrulla Fronteriza el pasado 19 de febrero en el condado de Cochise, a unos 40 kilómetros al noreste de Douglas.
Miami, 23 de febrero (EFE).- Las autoridades forenses del estado de Arizona, en la frontera sur de EU, confirmaron que un migrante murió debido a «múltiples» impactos de bala disparados el sábado pasado por un agente de la Patrulla Fronteriza en los límites con México.
El médico forense del condado de Pima (Arizona) no dio a conocer la identidad de la víctima porque, según dijo, las autoridades aún investigan los hechos.
Indicó que el migrante «recibió disparos del personal de la Patrulla Fronteriza el 19 de febrero en el condado de Cochise, a unas 30 millas (40 kilómetros) al noreste de Douglas».
«Se determinó que la causa de la muerte fue el resultado de múltiples heridas de bala», precisó el forense en un comunicado.
Por su parte, la Oficina del Alguacil del Condado de Cochise (CCSO, en inglés) señaló que continúa el proceso de identificación del fallecido y que se dará a conocer información adicional sobre los hechos a medida que esté disponible.
La oficina del alguacil dijo que ya fueron informados de la causa de la muerte del migrante y que investigan al «agente involucrado en el incidente».
De otro lado, la Coalición de Comunidades de la Frontera Sur pidió este miércoles una investigación independiente de los hechos, al denunciar que hubo irregularidades en la forma como se procesó el incidente.
«No puede haber una investigación independiente de los agentes fronterizos con la participación de la agencia que los emplea», señaló.
Además, subrayó que hubo versiones contradictorias de la Oficina del Alguacil de Cochise sobre el hecho.
«En lugar de que CCSO procesara la escena de inmediato, esperaron un día», criticó la organización promigrante en un comunicado.
Agregó que aunque los otros migrantes en el área fueron llevados por agentes a una estación de la Patrulla Fronteriza «de inmediato, CCSO no recuperó el cuerpo del migrante fallecido hasta el día siguiente».
Recordó que una situación similar sucedió en Del Río (Texas) el año pasado en un incidente de uso de la fuerza que involucró a migrantes haitianos.
«Los testigos fueron detenidos por agentes fronterizos y procesados (deportados) sin haber sido interrogados nunca por investigadores independientes», indicó.