Los acuerdos destinados a contener el flujo de inmigrantes sin papeles hacia la frontera norte de México han limitado la capacidad de los indocumentados de solicitar asilo en EU y han generado críticas sobre posibles violaciones al derecho migratorio internacional
Ciudad de México, 22 de septiembre (SinEmbargo/EFE).- El Presidente de Estados Unidos, Donald Trump, presumió ante la Organización de las Naciones Unidas (ONU) los acuerdos con México Guatemala, Honduras y El Salvador para frenar la migración.
«Hemos llegado a históricas alianzas con México, Guatemala, Honduras y El Salvador para detener el tráfico de personas», dijo el mandatario estadounidense.
Esos acuerdos, destinados a contener el flujo de inmigrantes sin papeles hacia la frontera norte de México, han limitado la capacidad de los indocumentados de solicitar asilo en EU y han generado críticas sobre posibles violaciones al derecho migratorio internacional
Trump tuvo otra frase claramente diseñada a medida de los votantes de origen cubano y venezolano en Florida, que pueden ser decisivos para ayudarle a retener, en las elecciones del 3 de noviembre, ese estado clave que ganó por un estrecho margen en 2016.
«Estamos defendiendo al pueblo de Cuba, Nicaragua y Venezuela en su justificada lucha por la libertad», subrayó el mandatario, en una breve mención a su política de mano dura hacia esos tres países.
Y como hizo el año pasado ante la ONU, Trump también defendió este martes su controvertida política migratoria, que según apuntan algunas encuestas, no es tan impopular como parecía entre los votantes hispanos de estados clave como Arizona o Nevada.
El discurso de Trump, que con apenas siete minutos fue el más corto que ha dado ante la Asamblea General, también aludió a temas que motivan a sus votantes en la derecha cristiana, como la defensa de la «libertad religiosa» y la «protección de los niños no nacidos», es decir, su oposición al derecho a abortar.
El mandatario dedicó menos tiempo a Irán del que se esperaba: apenas mencionó las sanciones que ha impuesto a ese país y promocionó su decisión de asesinar al general iraní Qasem Soleimaní.
Además, presumió de haber «revitalizado la alianza de la OTAN, donde otros países pagan ahora una parte mucho más justa» de su financiación.
-Con información de EFE