Durante el sexenio del Presidente Enrique Peña, las tomas clandestinas alcanzaron una cifra récord de 36 mil 999, un incremento de 262 por ciento, de acuerdo con el más reciente reporte de Petróleos Mexicanos. Esta cantidad es siete veces mayor a la reportada en la administración del panista Felipe Calderón Hinojosa, con un total de 4 mil 838.
Los estados con el mayor número de reportes en lo que va del 2018 son: Puebla (1,318), Hidalgo (1,055), Guanajuato (1,016), Jalisco (902) y Estado de México (850).
Ciudad de México, 22 de septiembre (SinEmbargo).– El robo de combustible en México se ha incrementado en el actual sexenio, donde las tomas clandestinas alcanzaron una cifra récord de 36 mil 999, un incremento de 262 por ciento, de acuerdo con el más reciente reporte de Petróleos Mexicanos (Pemex).
La cantidad es siete veces mayor a la reportada en la administración del panista Felipe Calderón Hinojosa, cuando se registraron 4 mil 838 tomas clandestinas.
De acuerdo con los registros de la petrolera, en el sexenio del Presidente Enrique Peña Nieto el robo de combustible se incrementó gradualmente, con 28 mil 257 tomas clandestinas reportadas de 2013 a 2017.
En 2013 se reportaron 2 mil 627 ductos ilegales, para 2014 esa cifra se elevó a 3 mil 674, y en 2015 se hallaron 5 mil 574 tomas clandestinas.
El año récord era 2016 con 6 mil 873 ductos ilegales reportados, sin embargo, en 2017 alcanzó un nuevo récord de 9 mil 509 tomas clandestinas.
Hasta julio de este año suman un total de 8 mil 742 reportes, pero la cifra puede aumentar y alcanzar un nuevo máximo a fin de 2018.
Los estados con el mayor número de reportes en lo que va del 2018 son: Puebla (1,318), Hidalgo (1,055), Guanajuato (1,016), Jalisco (902) y Estado de México (850).
Puebla es el estado donde los huachicoleros (ladrones de combustible) han ordeñado más ductos. Apenas el 12 de septiembre uno de esos ductos puso en alerta a nueve colonias del norte de la ciudad, pues al perforar una toma, que creyeron era de combustible, provocaron una mega fuga de Gas LP.
Los constantes operativos de la Marina y el Ejército, así como el monitoreo y cierre de ductos, provocó que los ladrones de gasolina buscaran otro medio para seguir robando: la extracción ilegal de Gas LP.
El robo de gas LP fue detectado en Tepeaca cuando “El Colorado” comenzó a marcar su territorio en contra de bandas de huachicoleros locales. Sin embargo, los vecinos de Tepeaca saben que fue invitado al negocio desde la Federación, por gente con influencias.
Esta colusión entre las autoridades de Pemex y los ladrones de combustible, controlados en su mayoría por los cárteles de la droga, ha llegado hasta la prensa estadounidense.
La semana pasada, la revista Rolling Stone reveló que el Cártel del Golfo controla el robo de combustible, las importaciones y exportaciones de petróleo y gas natural en el cruce fronterizo entre México y Estados Unidos, todo, en complicidad con cuerpos policiales, funcionarios de Pemex y empresarios de ambos lados de la frontera.
Los señalamientos en contra de funcionarios de Pemex, afirmó Rolling Stone, daría sentido a las acusaciones del ahora Presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, de señalar que la principal mafia está al interior de la petrolera.
“López Obrador ha criticado la privatización de Pemex y quiere desvincular la seguridad de México de la guerra contra las drogas liderada por Estados Unidos. También se ha comprometido a tratar el delito abordando las causas principales, que dice son pobreza y corrupción gubernamental. En un video de la campaña, López Obrador se para frente a una estación de Pemex, que según dice está dirigida por una ‘poderosa mafia’, y afirma que por cada barril de gasolina que los huachicoleros roban, los funcionarios de alto nivel roban 10 barriles en Pemex y el gobierno”, destacó la revista.
En abril pasado, el Senado de la República aprobó un dictamen para aumentar hasta con 30 años de prisión a quienes cometan los delitos de robo y comercialización de hidrocarburos, petrolíferos o petroquímicos y demás activos.
Los senadores respaldaron las reformas a los artículos 8 al 19 de la Ley Federal para Prevenir y Sancionar los Delitos cometidos en materia de Hidrocarburos, que buscan disminuir la alta incidencia de estos ilícitos.
A pesar de este aumento en las sanciones por el robo de combustible, este delito sigue considerándose como no grave, por ello, el Presidente electo Andrés Manuel López Obrador anunció en agosto pasado un plan para impulsar una serie de reformas que lo convertirán en grave.
