«Nada más decirle que no se angustie, no se preocupe. Nosotros aquí le apoyamos y usted puede subir los videos a drive o como sea que nos mande el link y nosotros le ayudamos para ponerlo», le dijo una estudiante, y entonces el semblante del profesor cambió.
Ciudad de México, 22 de agosto (SinEmbargo).- No poder tomar clases de manera presencial debido a la pandemia del coronavirus ha provocado que muchas personas hayan tenido que adaptarse de a poco a las nuevas tecnologías; sin embargo, no ha sido una tarea fácil, sobre todo, para los migrantes digitales, entre ellos, profesores que no están familiarizados con aplicaciones o computadoras.
Tal es el caso de un maestro, quien pretendía dar su sesión a través de una plataforma digital, pero conforme transcurría el tiempo, se le presentaron algunas complicaciones, lo que provocó que comenzara a desesperarse.
A través de un video compartido por un usuario de Twitter, se observa cómo el docente intenta dar la clase, pero al presentarse algunas desavenencias durante la transsmisión tu semblante comienza a cambiar.
Entonces, el maestro se muestra apenado y frustrado. Se mesa el cabello. «¿Tienen alguna duda?», les pregunta casi al borde de las lágrimas; empero, contrario a lo que pasa comúnmente, sus alumnos, al notar el rostro desencajado del profesor, comienzan a alentarlo.
No entiendo como hay personas que tratan mal a sus profesores. El día de hoy nuestro doctor tuvo algunos problemas técnicos durante su clase y se veía muy apenado y triste .. y pues bueno aquí sus alumnos alegrándole el día ?
pueden apreciar como cambia su carita ?❤️ pic.twitter.com/gdsyzPV3hm
— r. (@reginahl_) August 21, 2020
«Nada más decirle que no se angustie, no se preocupe. Nosotros aquí le apoyamos y usted puede subir los videos a drive o como sea que nos mande el link y nosotros le ayudamos para ponerlo», dijo una estudiante.
Ante la muestra de solidaridad, la expresión del maestro cambia y la sonrisa vuelve a él. De este modo, les agradece las palabras de aliento y les reitera su apoyo por si existe alguna duda.
«Muchas, muchas gracias. Gracias, estoy al borde del llanto», menciona el profesor tras las palabras de sus aprendices.
Al final, otra estudiante reconoce el profesionalismo del maestro: «además su clase está muy interesante y bonita su clase», dice.