El 70 por ciento de los «smartphones» y «tablets» que se estropean durante el período de verano lo hacen por culpa de un “uso poco responsable” de los mismos.
Por Andrea Núñez-Torrón Stock
Ciudad de México, 22 de agosto (SinEmbargo/TICbeat).- Energy System ha identificado tres principales motivos de las averías de tablets y smartphones: el calentamiento, la humedad y los descuidos. Por otra parte, los dispositivos son más susceptibles de ser utilizados por los más pequeños de la familia durante las vacaciones, aumentando los riesgos de caídas y roturas.
Una de las recomendaciones básicas facilitadas por la empresa para evitar las averías se trata de no utilizar el smartphone o tablet con las manos mojadas, ya que esta es la causa de seis de cada diez averías que se arreglan tras el verano.
Cuando respondemos una llamada al salir de darnos un baño, un poco de agua -de forma imperceptible- puede penetrar en su interior y propiciar fallos en su funcionamiento a corto o medio plazo.
LA HUMEDAD Y EL SOL
Entre los descuidos más frecuentes que cometemos sobre nuestros dispositivos se hayan la exposición a fenómenos de exceso de calor o sometimiento a condiciones de humedad.
Por una parte, una tercera parte de las reparaciones se produce por la humedad y otras tres de cada diez averías reparadas tras el verano se deben al efecto de la arena, que puede rayar la superficie de las pantallas táctiles y provocar fallos en sus componentes interiores.
El sol y las elevadas temperaturas también son enemigas del buen estado de nuestros dispositivos. Es altamente dañino a medio plazo dejar, durante un rato prolongado, los terminales en la guantera del coche o en una bolsa de playa expuesta al sol, ya que el 10 por ciento de las averías que se atienden después del verano se produce por estos motivos. Desde Energy System recomiendan apagar los dispositivos y valerse de fundas protectoras del sol y el calor.
Si realizas fotografías en la playa, las compartes en redes sociales o sueles escuchar música mientras tomas el sol, recuerda que dichas acciones multiplican el riesgo de que los dispositivos sean dañados. Extrema la seguridad, manténlos a la sombra y apártalos del calor excesivo y de la humedad del mar o de la piscina.