El propio Trump anunció el acuerdo en un tuit, en el que aseguró que el pacto lo apoyaban el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell; el líder de la minoría demócrata, Chuck Schumer; la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, y el líder de la minoría conservadora en esa cámara, Kevin McCarthy.
Washington, 22 jul (EFE).- La Casa Blanca y los líderes del Congreso alcanzaron este lunes un acuerdo que permitiría aprobar un presupuesto para los próximos dos años, elevar la capacidad de gasto del Gobierno de Estados Unidos en 320 mil millones de dólares y suspender el techo de la deuda hasta después de las elecciones de 2020.
El pacto, que aún debe ser aprobado por el Congreso, permitiría al presidente estadounidense, Donald Trump, desviar fondos de programas militares para construir el muro en la frontera con México, lo que podría restar apoyos al acuerdo entre la oposición demócrata.
El propio Trump anunció el acuerdo en un tuit, en el que aseguró que el pacto lo apoyaban el líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell; el líder de la minoría demócrata, Chuck Schumer; la presidenta de la Cámara Baja, la demócrata Nancy Pelosi, y el líder de la minoría conservadora en esa cámara, Kevin McCarthy.
«Estoy encantado de anunciar que hemos llegado a un acuerdo (…) de dos años sobre el presupuesto y el techo de la deuda, sin píldoras envenenadas», afirmó Trump, en referencia a la ausencia de medidas adheridas a esa ley y relativas a otros temas.
«¡Este ha sido un gran acuerdo para dar otra gran victoria a nuestros grandes militares y veteranos!», añadió.
El acuerdo suspendería el techo de la deuda federal del país hasta el 31 de julio de 2021, lo que aparcaría el debate sobre el tema hasta después de los comicios en los que Trump se jugará la reelección, confirmó un comunicado emitido por Pelosi y Schumer.
El pacto daría además luz verde a un presupuesto que fijaría los niveles de gasto del Gobierno hasta el 30 de septiembre de 2022, lo cual rompería la costumbre del Congreso de aprobar medidas que apenas financian el Ejecutivo durante unos pocos meses y mantienen permanentemente viva la amenaza de una paralización burocrática.
Pero el acuerdo afronta una fuerte resistencia de legisladores influyentes de ambos partidos, entre ellos Patrick Leahy, el senador demócrata de mayor rango en el comité de Gastos del Senado.
«Me preocupa que la Cámara Baja esté dispuesta a darle (a Trump) flexibilidad para que agarre el dinero y lo mueva donde quiera, incluido el muro (con México). Así que tal y como está ahora, yo no voy a votar a favor», dijo Leahy al diario The Washington Post.
Algunos republicanos también lamentaron que el paquete amplíe tan generosamente la capacidad de gasto del Gobierno, en un año en el que se espera que el déficit alcance el billón de dólares, y con una deuda que este mes llegó a los 22 billones.
Sin embargo, Pelosi y Schumer defendieron el pacto, al subrayar que les ha permitido lograr que el Gobierno planee gastar «10 mil millones de dólares más» en temas ajenos a la defensa nacional que en el dossier militar.
«Con este acuerdo, queremos evitar otro cierre parcial de la Administración, que es algo tan dañino para las necesidades del pueblo estadounidense, y honrar el trabajo de nuestros empleados públicos», indicaron los líderes demócratas en un comunicado.